El Peixe podría sondear ser filial del Obra para evitar el aval de LEB Oro

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Carlos Parada Hermo

El club azul necesita depositar 180.000 euros, además de los 36.000 de cuota de inscripción y los 220.000 de gastos del equipo, para ascender

27 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

¿Se imaginan que el Obradoiro tuviese en el Peixe Galego su filial? Aunque para los menos conocedores del básquet gallego pueda resultar una relación sorprendente, los más duchos en el tema lo ven como lo que los americanos llaman un win-win, un trato en el que todos ganan. Todavía no se han producido contactos oficiales entre el Rio Natura Monbus Obradoiro y el Marín Ence Peixe Galego, pero solo una alianza de estas características podría garantizar a los peixiños lo que es suyo: el ascenso a la LEB Oro.

«Ahora empieza nuestra verdadera liga», anunciaba minutos después del final del partido el presidente del club azul, Luis Santiago. El padre del Peixe ha sido señalado en multitud de ocasiones como la persona que más desvelos ha sufrido por el club marinense. Horas y horas y noches y noches ha pasado Santiago buscando la forma, no solo de sacar a flote, sino de hacer visible en el mapa del básquet, a un pequeño equipo del que apenas se oía hablar hasta este año. Pero las noches en vela del presidente de un club que apenas maneja 140.000 euros para su primer equipo en LEB Plata no va a ser suficiente para conseguir sellar un ascenso que deportivamente se ha ganado con creces. Como el respeto de sus contrincantes. Tampoco la unión de sus jugadores, ni los mates, triples y la calidad de su juego garantizan que el Peixe vaya a poder disfrutar del sudor que repartió por toda España esta temporada.

La subida de categoría no es solo una cuestión de corazón, sino de bolsillo, que es precisamente lo único de lo que no puede presumir el club azul. De los 180.000 euros que tiene de presupuesto anual para todas sus categorías, el 80 % es para su primer equipo. Esa es exactamente la cantidad que necesitaría el Peixe Galego depositar como aval para entrar en la LEB Oro.

Y la cuota de inscripción

A esa cifra habría que sumarle los 36.000 euros que tendría que aportar en concepto de cuota de inscripción. Es decir, aunque el club pusiera todo el dinero del que dispone actualmente para asegurarse el acceso a la categoría inmediatamente superior del basloncesto español, no podría hacer frente a los fichajes, equipación, Seguridad Social y, lo que supone un desembolso mayor: los viajes.

Solo para mantener al primer equipo tras el ascenso el club necesitaría manejar entre 220.000 y 240.000 euros. Aunque la diferencia respecto a los 140.000 actuales es notable, la proximidad de sus futuros rivales en LEB Oro -donde en estos momentos militan cinco equipos entre Galicia y Asturias, en lugar del único gallego de LEB Plata, el Xuven- permitiría reducir la partida empleada para desplazamientos y noches de hotel. Podría realizar viajes de idea y vuelta a, por ejemplo, Ourense, A Coruña, Palencia o Lugo, y ahorrar también en alojamiento. Un convenio de cantidades suficientes con algún patrocinador provincial o, incluso, con organismos como la Diputación de Pontevedra, le aseguraría los gastos mínimos.

Pero el verdadero reto al que se enfrenta ahora el club azul es lograr reunir el dinero suficiente para hacer frente al aval. O hacerse filial de un equipo de ACB. La Federación Española de Baloncesto (FEB) permite a cualquier club de LEB Oro evitar este depósito si se vincula con uno de la máxima categoría española, al entender que los tres millones de euros que estos han depositado como aval es suficiente para cubrir el de 180.000 euros. El Obradoiro sería, así, el más firme candidato a erigirse en salvador del Peixe Galego, por cuanto no le supondría ningún desembolso económico y le permitiría gozar de una cantera de LEB Oro para su primer equipo. Ambas entidades verían, además, reforzada su estructura deportiva, lo que obligaría al Peixe a mantener muy saneadas y al día sus cuentas.