Las fuerzas sindicales equiparan la protesta del jueves con otras históricas
PONTEVEDRA
La mayor movilización en la ciudad fue contra el atentado del 11-M, que suscitó el rechazo de 70.000 personas
21 jul 2012 . Actualizado a las 06:59 h.La manifestación del pasado jueves contra los recortes de Rajoy congregó a miles de personas de todas las edades y condiciones unidas por una misma causa. Tal fue la respuesta de la ciudadanía, que las fuerzas sindicales equipararon el número de participantes registrado en esta con el obtenido en las movilizaciones históricas vividas en la ciudad.
«Eu asistín as manifestacións de Nunca Máis e de Non á Guerra e foron manifestacións similares», apuntó Rafael Iglesias, secretario comarcal de CIG, mientras veía llegar a la marea humana a la Subdelegación del Gobierno. «De feito, tivémonos que desviar ó principio de Benito Corbal polo casco vello para evitar empatar co final da protesta», añadía. Del mismo modo, Miguel Vilacoba, presidente de la Federación Teucro, comparaba ayer el éxito de convocatoria de la marcha contra los recortes con las grandes convocatorias que acogió la ciudad.
La más multitudinaria tuvo lugar hace ocho años, cuando unas 70.000 personas anegaron las calles de la ciudad, en una marea en duelo, tras el atentado terrorista del 15-M. Un hecho que convulsionó a todo el país y en el que Pontevedra se sumó masivamente.
Aunque la última protesta que congregó en la capital cinco dígitos fue hace menos de cuatro meses, con motivo de la huelga general del 29 de marzo. Entre 10.000 y 20.000 manifestantes se sumaron a la convocatoria, según los cálculos independientes. Sin embargo, la división sindical entre las fuerzas mayoritarias separó en aquella ocasión a los pontevedreses que decidieron mostrar su rechazo contra la reforma laboral.
En ello incidió ayer Antón Louro, portavoz del grupo municipal socialista, quien aseguró que «a unidade sindical foi unha cuestión que os cidadáns souberon valorar» en la movilización del pasado jueves, secundada -según los convocantes- en 40.000 personas. El teniente de alcalde de Pontevedra apuntó que la protesta «contra as políticas liberais foi un exercicio de madurez democrática» y destacó la ausencia total de incidentes en una marcha que «deixa moi claro que é necesario un cambio de rumbo, e que a factura da crise debe repartirse máis equitativamente».
Frente a este, Jacobo Moreira, apuntó que la respuesta del jueves fue algo «lógico». «Fueron unas medidas muy duras las que se están adoptando, para nosotros no resultan agradables, pero si se llegó a este punto fue porque el enfermo estaba muy mal», suscribió.