El diseñador Modesto Lomba buscará un hueco en su agenda para recoger su Centola de Ouro. Compartirá este «honor» con Posada del Mar, Teresa González y Amegrove
25 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.Las Centolas de Ouro 2009 tienen más sabor grovense que nunca. Los cuatro galardonados de este año tienen un honda vinculación con la localidad, aunque alguno, caso del diseñador Modesto Lomba, lleve más de una década sin cruzar O Bao. Y no es porque no le apetezca. «Es muy agradable ir a O Grove», comentaba ayer. Pero el trajín de las pasarelas -Lomba lleva sus diseños de Devota&Lomba por todo el mundo- apenas le deja tiempo para escaparse a esta esquina del mapa. Ahora no tiene excusa. El día 9 de octubre está convocado para recibir la Centola de Ouro de modo que ya ha empezado a hacer sitio en su agenda para no faltar a la cita. «Lo tengo un poco ajustado, pero creo que podré estar», indicó ayer.
«Es para mí un absoluto honor que se reconozca mi trabajo, y más si viene de la tierra de mi madre, que no deja de ser mi tierra». Y es que Lomba tiene gravados en la retina y en el corazón las vacaciones de verano y de Navidades que pasó en O Grove desde que era niño. Su madre ya no está pero aún tiene un buen motivo para reencontrarse con su otra casa: visitar a la familia y cumplir una deuda pendiente con Antonio Pernas, que, según desveló ayer Lomba, está deseando conocer la Festa do Marisco.
Un millón de clientes
Quien la conoce y mucho son Jesús Veiga y Adela Rubirosa, el matrimonio que regenta el restaurante Posada del Mar. «Sempre é unha satisfacción recibir un premio. Algún mérito terei porque eu algo colaborei en dar a coñecer O Grove», comentaba ayer Jesús. Por su restaurante, que primero fue de sus padres, han pasado cerca de un millón de clientes desde que cogió el negocio hace más de 40 años, según sus cálculos. Entre ellos no faltan caras conocidas como Julio Iglesias, Camilo José Cela y Vargas Llosa. «Pero eu non lles fixen fotos nin nada diso porque non me gusta molestar».
El jurado de las Centolas de Ouro premió a este restaurante -es habitual que cada año se distinga a un establecimiento hostelero de la localidad- por su condición de «familia restauradora do Grove». Pero parece que la saga se acabará con Jesús y su mujer porque, aunque tienen cinco hijos -entre ellos el actor Javier Veiga a quien correspondió conducir la gala de las Centolas de Ouro el año pasado -, ninguno quiere seguir con el negocio.
Jesús tiene 61 años y ya anuncia que se jubilará a los 65 de modo que, como mucho, queda menos de un lustro para disfrutar de la cocina de Adela; el mero con almejas, la merluza a la gallega y el guiso de rodaballo son las especialidades de la casa. «Ela ten o 80% do mérito», señala Jesús Veiga.
El matrimonio Veiga-Rubirosa compartirá el protagonismo el próximo día 9 de octubre con Modesto Lomba y con los otros dos premiados con las distinciones de la Festa do Marisco: la autora teatral grovense, Teresa González Costa, y los integrantes de la cooperativa de mejilloneros Amegrove.
El fallo fue adoptado el viernes por la noche tras un intenso debate en el seno del grupo de gobierno de O Grove. La entrega de las Centolas de Ouro cambia de escenario este año. Como el cine O Marino está cerrado, el Concello ha optado por trasladar esta cita a la carpa institucional de la fiesta, situada en O Corgo, (20.00 horas). Será un acto más corto y más sobrio que el del 2008 en el que, de todos modos, no faltará la música.