El Moderno acoge la muestra de Ramón Iribarren Pionero de la defensa y protección de los recursos naturales que ofrece el mar, Ramón Iribarren Cavanilles es hoy recordado como el padre de la ingeniería marítima del siglo XX. La Autoridad Portuaria de Marín-Pontevedra expone en el Café Moderno, con motivo del centenario de su nacimiento, su extensa obra y los importantes métodos desarrollados por este ingeniero guipuzcoano.
07 jun 2001 . Actualizado a las 07:00 h.Hasta en el desembarco de Normandía tuvo que ver este adalid de la defensa costera, cuya trayectoría profesional y científica puede contemplarse ahora en la sede de la Fundación Caixa Galicia. No es que Iribarren se pusiera al mando de las tropas, sino que su famoso Método de los Planos de Oleaje ayudó a los aliados a determinar cuál era el mejor punto para desembarcar en la costa francesa. Con dicho método se explicaba por primera vez los fenómenos de difracción y refracción, aunque su aportación fundamental es su estudio sobre el talud límite entre la rotura y la reflexión del oleaje. Iribarren, ingeniería y mar recorre, a través de cinco áreas, su contribución, desde los años 20 hasta 1967, en que murió, al desarrollo de la ingeniería marina y, en menor medida, aeronáutica. El presidente de Puertos del Estado, José LLorca, y el presidente de la Autoridad Portuaria de Marín-Pontevedra, Tomás Iribarren, presidieron su inauguración. Su comisaria, Lola Romero, indicó que este ingeniero, con una gran formación humanística, no sólo puso en práctica su intuición como técnico y científico en el litoral guipuzcoano, cuyo Grupo de Puertos dirigió a lo largo de 40 años, sino que sus proyectos trascendieron a otros ámbitos. Romero subrayó el estudio para la defensa costera de Cartagena de Indias, en Colombia, y en Galicia, el puerto de Malpica -cuyo proyecto dirigió desde el Consejo de Obras Públicas- y en A Coruña se utilizó un estudio suyo sobre diques.