«Es mi tercer hijo, pero estaba nerviosa y con mucho miedo»

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

VERÍN

CEDIDA

El área de materno infantil de Ourense se mantiene como un oasis de felicidad, pese al covid-19

26 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Isidora García García no era primeriza. Sin embargo, el estado de alarma y todo lo que conlleva de estrés e incertidumbre para una mujer embarazada hace que la experiencia de su tercer parto no tuviera nada que ver con las anteriores. «Las últimas semanas estaba muy nerviosa y con mucho miedo. Me tuvieron que inducir el parto por no poder hacer monitores cada dos días en el hospital y la verdad es que pasamos unos momentos complicados», señala.

En la madrugada de este viernes nació Eduardo, su tercer hijo. en el área de materno-infantil del CHUO, que se mantiene como un oasis de felicidad pese al Covid-19. El bebe llegó tras un parto sin mayores complicaciones aunque con todas las precauciones a las que obliga la pandemia provocada por el coronavirus. «El parto fue muy bien, pero la sensación de dar a luz con la mascarilla es muy incómoda. Parece que te ahogas». Al pequeño Eduardo ya le esperan con los brazos abiertos sus hermanos José Manuel (10 años) y Libertad (18 mees). Están con su padre, mientras que Isidora estuvo acompañada en todo momento por su madre María Jesús. «Toda mi familia es de Salamanca y no pudo venir nadie. Eso también ha cambiado mucho por el coronavirus», explica.

La incertidumbre pese a tener a su hijo ya en brazos todavía no ha desaparecido de todo: «Ya nos han dicho que tenemos que extremar las precauciones y las medidas de higiene en casa. Tenemos que acostumbrarnos a estar con las mascarillas por el bebé». Eso sí, al igual que miles de familias ourensanas, Isidora mira con ilusión el nuevo escenario que se abre, con la posibilidad de que los niños puedan salir a la calle a dar pequeños paseos: «El mayor lo está llevando muy mal. Tenía su rutina de ir al colegio y al parque con sus amigos y ahora en casa no se aguanta».

En Verín

Hasta que el Covid-19 entró de lleno en nuestras vidas, la actualidad informativa en la provincia giró entre finales del 2019 y principios del 2020 hacia Verín. El cierre y posterior apertura del paritorio del hospital comarcal provocó una reacción social en la villa. Allí también hay nacimientos en plena cuarentena. El pequeño Antón nació a finales de esta semana y es el segundo hijo que da a luz en el centro comarcal Verónica Toro, vecina de un pequeño pueblo de Oímbra. «Los últimos días del embarazo y con el confinamiento se me hicieron algo largos», explica. Verónica quiere destacar el trato en el hospital: «Esto es casi como una familia y con unos cuidados estupendos».