La fortaleza de Lucía Blanco, centenaria que recibió el alta tras 19 días ingresada en Piñor y que ya ha regresado a su domicilio en la residencia de O Barco
03 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Con 106 años, Lucía Blanco recibía este sábado el alta en el hospital ourensano de Piñor, donde estuvo ingresada 19 días como paciente de covid-19. Llegó contagiada desde la residencia Nuestra Señora de Fátima, de O Barco de Valdeorras, y su recuperación es «un acicate» para el equipo sanitario que la atendió. Nacida en diciembre de 1913, vivió otra pandemia, la gripe española de 1918 y la Guerra Civil; esas penalidades y su fuerte carácter han sido quizás factores que la han ayudado a superar esta nueva prueba. Pese a su elevada edad, no tenía patologías de base y durante su estancia en Piñor (Barbadás) se ha mantenido estable hasta su recuperación, confirmada por la segunda PCR negativa y por un test inmunológico.
Además de su fortaleza natural, la atención que le han prestado en esta unidad asistencial de cuidados intermedios para enfermos de covid-19 ha sido clave. El hospital de Piñor se creó en los años 40 del siglo pasado para tratar a enfermos infecciosos, concretamente de tuberculosis, recuerda Álvaro de Castro, médico de familia coordinador de esta unidad y estudioso de la enfermedad. Con la crisis del coronavirus, en este hospital se reservó la primera planta para ingresar a pacientes de covid. A su soleada balconada con vistas sobre Ourense salió ayer Lucía para recibir un ramo de flores como felicitación por su recuperación. De Castro destaca la implicación y el trabajo de todo el equipo de especialistas en medicina de familia y comunitaria.
Y de vuelta a O Barco, la esperaban sus cuidadores habituales. «Te queremos mucho, Lucía. Y yo a vosotros más», contestó ella, contenta de regresar a su entorno, relata Pablo Fernández, director de la residencia valdeorresa. Trabajadoras que la conocían y estaban librando acudieron al centro a recibirla.