El empujón de la grada

La Voz

OURENSE

Santi M. Amil

19 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Eran solo 300 pero los espectadores del Pazo se hicieron notar cuando el equipo lo necesitaba y para pitar a los árbitros ante decisiones que perjudicaban a los locales. Rozitis volvió, con Girona, dos temporadas después, y pidió una de las últimas posesiones dudosas para su actual equipo. García de Vitoria se desesperó en el tercer cuarto y se sentó para dibujar el final en el cuarto.