«El proyecto de Coloma es idóneo para un ciclista con ambiciones»

OURENSE

Lander López

El alaricano Iván Feijoo cambiará de equipo tras el mundial de ciclocrós del próximo febrero

27 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Navidades en casa, sin deshacer la maleta. Iván Feijoo Alberte (Allariz, 1999) partió ayer mismo hacia Bélgica. La Copa del Mundo no contempla vacaciones y el calendario invernal incluso está más comprimido en tiempos de pandemia. Hoy mismo toca afrontar la cita de Dendermonde, para aderezar unas fechas de lo más ajetreadas para el ciclista ourensano, al hacerse oficial su fichaje por el BH El Templo Cafés, la estructura que lidera el medallista olímpico Carlos Coloma.

«La verdad es que ya tenía pensado cambiar de aires, tras estos años centrado en el ciclocrós. Dudaba entre la carretera y el XCO, pero cuando me reuní con Coloma y me mostró todo lo que tenía montado, no lo dudé. Quería aprovechar mi último año sub 23 en la modalidad olímpica y él decidió crear este nuevo equipo para competir en las mejores condiciones en el Open de España y en la Copa del Mundo», desgrana un ilusionado Feijoo.

Mientras el equipo Élite se reforzó con el campeón de España David Valero, confirmó además la continuidad del macedano Pablo Rodríguez Guede, con un objetivo marcado en dirección a los Juegos de Tokio. La apuesta, en todo caso, también es de futuro, incluyendo el nuevo plantel sub 23, con Feijoo, David Campos y Jaume Bosch, así como la presencia de Nuria Bosch en las carreras femeninas.

Iván también está muy motivado por lo que representa la nueva formación del equipo riojano: «Se toman muy en serio el trabajo con la cantera, el proyecto de Coloma es idóneo para un ciclista con ambiciones y con el objetivo de llegar a ser profesional».

Y lo dice un estudiante de Medicina que es capaz de mantener su nivel competitivo a nivel internacional -viene de un podio de Copa del Mundo-, sin que se resientan sus notas: «Llevo el curso bien encaminado, pero ahora vienen los exámenes más fuertes, tanto en la carrera como en el calendario de ciclocrós, será un mes exigente».

Bélgica será punto neurálgico de un calendario de duras pruebas internacionales

Iván Feijoo se encaminaba a embarcar una vez más para volar hacia Bélgica. Ha sido su destino más recurrente desde el fichaje por el Nesta y su apuesta por el ciclocrós. Aunque la modalidad olímpica volverá a ser su máximo reto a partir de marzo, el alaricano sigue muy mentalizado en brillar sobre el barro y ratificar todo lo que apuntó en los últimos meses.

En el Campeonato de Europa llegó a rodar en cabeza, pero aún no era su momento: «Por entonces no había ajustado aún el ritmo de los entrenamientos y pagué la velocidad con la que salí, así que no aguanté. Después nos quitamos la espina con el podio en la Copa del Mundo de Tabor». Hoy regresa al certamen continental y le aguarda un intenso enero, que desembocará en el mundial del Ostende. Iván ya sabe lo que es un top diez de nivel universal y ahora quiere dejar otra muesca en su palmarés, antes de volver al XCO.