Hace más de veinte años nació en Estados Unidos el «Geocaching» y en Ourense tiene sus seguidores
04 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Hace más de veinte años nació en Estados Unidos el Geocaching. En el 2000 Bill Clinton desbloqueó el GPS, hasta entonces un señal militar para la navegación móvil por satélite, introduciéndolo entre los civiles y cambiando la forma de moverse por el mundo. Así nació esta actividad que une aventura, conocimiento y naturaleza; y que consiste en esconder y encontrar tesoros, denominados caché, en cualquier lugar con la ayuda de este sistema de posicionamiento global. Hay millones de personas en el mundo que lo practican y en Ourense también ha dejado huella. Gracias a una aplicación móvil, los jugadores reciben pistas sobre los «tesoros» que hay cerca de donde se encuentran y, según los últimos datos, en la provincia hay escondidos cerca de mil cachés, muchos en la propia ciudad. Beatriz y Jose Luis son BeayPepe. Él inició a su pareja en el Geocaching y en la actualidad recogen en un blog y en su cuenta de Instagram su pasión por esta actividad. Buscan y esconden algunos tesoros -dicen que tienen más de cien dispuestos en distintos puntos de la capital ourensana- y aprovechan los viajes que realizan a otros puntos del mundo para dejar su huella. «Tan importante es encontrarlos como todo el proceso. Se dan pistas sobre su ubicación y de esta manera vas conociendo cosas de las ciudades o de los lugares a los que vas y que antes desconocías, incluso de tu propia ciudad», explica Beatriz. Porque no se trata de encontrar un gran «tesoro del pirata» sino de vivir una experiencia diferente. «Nos encanta la naturaleza y también es una forma de hacer senderismo. Una vez encontramos como tesoro un MP3 en un monte, pero hay cosas muy variadas. Lo importante es entender el juego», dice. Y es que el jugador debe dejar el tesoro en el lugar en el que se encuentra, dar cuenta firmando en un papel y seguir. Si no se hace así, el juego se paraliza. Y hay algo más. José Luis Taboada destaca los eventos CITO, que consisten en recoger la basura que encuentran en los lugares que se recorren para encontrar cachés. «En el Geocaching estamos muy en contacto con la naturaleza y esta actitud ya forma parte de nuestra forma de entender lo que hacemos», afirma. Por eso es importante conocer y aplicar las normas.