Negocios como Utopía o Varela Íntimo visten de San Valentín sus fachadas de una forma original y diferente
14 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Más allá del debate existente sobre si el día de San Valentín es una fecha simbólica en algunas relaciones o si, por el contrario, solo es un invento comercial para generar consumismo, no cabe duda de que no tiene por qué costar nada celebrar el amor y, además, es bonito. El amor a todos los niveles. Son numerosos, y mayoritarios, los negocios de la ciudad, y de la provincia, que en los últimos días se han sumado a este festejo añadiendo a sus escaparates referencias a esta fecha señalada por Cupido. Flores, carteles rojo pasión y muchos corazones inundan los ventanales de tiendas y comercios de todo tipo. Aunque hay algunos que destacan especialmente por ser diferentes a todo. Es el caso de la joyería Utopía. Las hermanas Bea y Marta Salgado, propietarias de la firma, han querido plasmar su percepción del amor como algo libre. Ellas preparan cada año un detalle especial de cara al 14 de febrero, habitualmente se trata del diseño de una joya exclusiva para ese día, pero en esta ocasión han apostado por que el regalo fuese gratis y para todos los que pasen frente a su local. Lo han hecho en su escaparate, a través de una ilustración realizada a mano alzada por la diseñadora ourensana Raquel Sousa. En ella aparecen dos cuerpos enfrentados en color blanco, cuyas manos se encuentran y entrelazan. Una imagen cargada de pureza y de significado. «Queríamos hacer algo diferente. Nosotras creemos en el amor, sobre todo en el amor propio y en el multidisciplinar», dice Bea. «Es verdad. El Día de los Enamorados ya no está dedicado exclusivamente a las parejas y nos encanta que sea así. Es más, en los últimos días han venido numerosas clientas a autorregalarse», añade Marta.
La originalidad es lo que prima en el escaparate de la lencería masculina Varela Íntimo con un enorme corazón realizado con calzoncillos rojos y blancos sobrepuestos unos a otros. «Lo que queríamos era generar un poco de actividad en este mes que es un poco parado en cuanto a venta y hacer algo a lo grande», explica Fernando Varela, propietario del negocio. Lo consiguieron con la ayuda de los alumnos del ciclo superior de Gestión de Eventos y Espacios Comerciales del CIFP Portovello. «Ellos lo diseñaron todo y una vez realizado el proyecto, la marca Impetus nos cedió todos los calzoncillos para llevarlo a cabo. Estamos muy contentos con el resultado porque es exagerado y llama mucho la atención», admite Fernando. Y lo cierto es que no solo llama la atención sino que también genera sonrisas entre los ourensanos que pasean por la calle Santo Domingo. «Es una alusión directa al amor. Nosotros creemos en él y consideramos que es lo que mueve el mundo», finaliza Moncho García, empleado de la tienda.