Una docena de casetas cerraron ayer tras seis días de actividad
08 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Las cifras no son para tirar cohetes, pero los organizadores de la feria del libro de Ourense bajaron ayer las persianas de la docena de casetas instaladas en la calle del Paseo con una mejor sensación que en el 2014. Las ventas crecieron ligeramente con respecto a la última edición aunque «no fue algo espectacular», según reconoce el presidente de la Agrupación de Libreros de Ourense. José Manuel García Mosquera no tiene dudas a la hora de buscar los motivos que han propiciado este repunte: «La ubicación es lo que más influye. El regreso a la calle del Paseo nos ha beneficiado, porque en la Alameda las mañanas eran muertas al no haber trasiego de gente».
Y es que como recuerda el presidente del colectivo, la feria del libro ourensana regresó a sus orígenes en el Paseo después de unos quince años. En su nueva ubicación, en el primer tramo en la zona más próxima al parque de San Lázaro, el movimiento de gente era mayor salvo en las horas centrales de la tarde. «Por las mañanas ya había ventas y a última hora de la tarde también. Solo fue una pena el calor que hubo todos estos días y que propició que de seis a ocho apenas hubiera movimiento de gente», señaló el presidente de la agrupación.
Con este balance positivo del cambio de emplazamiento, los libreros ourensanos confían en que se mantenga para los próximos años y así se pueda afianzar esa tendencia al alza, pese a que el sector no pasa ni mucho menos por su mejor momento.
En la feria, que se inició el pasado martes día 2 y que concluyó ayer, estuvieron instalados una docena de expositores. Diez de ellos pertenecían a librerías de Ourense, una era de Vigo y otra de Santiago. La Diputación de Ourense también contó con una caseta propia.
Las presentaciones infantiles tienen mayor tirón que las de literatura para adultos
Como es habitual, la feria del libro de Ourense contó con un amplio programa de actividades paralelas enfocado a fomentar la venta y la presencia de público en las casetas ubicadas en el primer tramo de la calle del Paseo. El éxito de estas, sin embargo, no fue el deseado por los organizadores. «Tuvieron poco tirón. Siempre nos plantean por qué no traemos a autores de renombre, pero lo cierto es que al competir en fechas con la feria de Madrid es bastante complicado, ya que las editoriales marcan la pauta y prefieren que los escritores se centren en la feria madrileña», explicó José Manuel García Mosquera, presidente de la Agrupación de Libreros de Ourense.
Sí que contaron con un mayor respaldo las presentaciones y actividades infantiles. «Los padres cada vez están más concienciados», aseguró el presidente del colectivo. En esta edición, puntualizó, también tuvieron una buena acogida por parte de los lectores las publicaciones que se presentan en la caseta de la Diputación de Ourense y que luego se vendían en los puestos de los libreros. «Este año funcionaron muy bien», explicó García.