Un centenar de empresas recurrieron a esta medida en lo que va de año
27 nov 2012 . Actualizado a las 07:30 h.Los expedientes de regulación de empleo (ERE) se han convertido en una realidad cotidiana fruto de la crisis económica. Ourense no escapa de esa tendencia, que se ceba especialmente con las pequeñas y medianas empresas. Esa sangría se ha acentuado en el 2012, el peor año de la crisis en este aspecto, hasta el punto de que en los diez primeros meses del año se hayan tramitado ya 105 en la provincia. La magnitud del incremento se entiende mejor si se comparan con los datos del mismo período del año 2011, donde los expedientes fueron 48, lo que supone un incremento del 118 %.
No solo han aumentado el número de empresas afectadas. También lo ha hecho, y en una mayor medida, la cifra de trabajadores que se han visto perjudicados. Así, de acuerdo con los datos que maneja la Consellería de Traballo, en Ourense cada día de este año seis empleados sufrieron en un ERE en su empresa. Los 1.816 afectados suponen un 310,9 % más que en el año anterior. Se trata de la provincia en la que más crecieron porcentualmente, ya que la media autonómica se sitúo en un 60, 4 %.
De los 105 registrados en la provincia, cinco fueron de extinción de puestos (97 trabajadores), 46 de suspensión temporal (1.441 empleados) y 54 de reducción de sueldo (278). Por sectores, casi la mitad de los expedientes corresponden a empresas del sector servicios (52). Por su parte, la industria suma ya 35 y la construcción acumula un total de 17.
La mayoría de los expedientes de empleo se concentran, según los datos que manejan los sindicatos ya que la Xunta no ofrece una estadística individualizada, en la capital y en su área de influencia. Entre los ERE más numerosos del 2012 se encuentran los de empresas como Adolfo Domínguez, que es una de las cinco firmas que en este año ha recurrido a un proceso de extinción de 50 empleos en su planta ourensana, en el polígono de San Cibrao. También se ha visto perjudicado el sector de la automoción con empresas como Luis Aragonés (Renault), As Burgas Motor (concesionario) o Hispaplasti (componentes de automóvil). De un ERE no se libraron empresas que hasta la llegada de la crisis destacaban por liderar sectores como el de las energías renovables (T-Solar) o el de las telecomunicaciones (Egatel).
Construcción y pizarreras
En la provincia también se han registrado casos notables en su tejido industrial, como el de la Constructora Hermanos Carrajo (Verín) o las pizarreras Irosa e Ipisa. En la comarca de Valdeorras hay que contabilizar el de la estación de montaña de Manzaneda.