Ourense se suma a los cambios mundiales en el diagnóstico del tumor
23 nov 2012 . Actualizado a las 07:30 h.Un comité profesional decidirá los cambios a introducir en las técnicas de prevención, diagnóstico y tratamiento del cáncer de próstata en Ourense a la luz de nuevos estudios que demuestran que la actual política de cribado generalizado para los mayores de 40 años no ha conseguido reducir la mortalidad en la medida de lo esperado.
De todo lo relacionado con el futuro de esta patología versó ayer la sesión de la Academia Médico Quirúrgica, que tuvo al urólogo Dionisio López Bellido como ponente. Con un título indicativo -«Screening de cáncer de próstata: ¿Es posible que nos hayamos equivocado?»-, López Bellido presentó los últimos estudios mundiales sobre la materia.
En esencia, demuestran que el screening de cáncer de próstata que se realiza en el mundo occidental desde 1986 -análisis de sangre del antígeno prostático específico (PSA) y tacto rectal- no ha permitido reducir la mortalidad.
La eficacia del método
Dos estudios, con más de 200.000 pacientes y de 14 años de evaluación, publicados en la revista The New England Journal of Medicine, pusieron en cuestión la eficacia de un método de prevención que no solo parece no funcionar como tal sino que, además, presenta efectos secundarios no deseables.
«Era algo que sospechábamos y que estos dos estudios confirmaron -expone López Bellido-. El actual sistema de detección permite diagnosticar el cáncer de próstata entre cinco y diez años antes de presentar síntomas pero eso tiene un precio porque el tacto rectal y el análisis de PSA nos llevan a hacer otras pruebas, como biopsias, que pueden causar sangrado, dolor, infecciones y algo muy importante, ansiedad, porque no es lo mismo no saber que saber que lo tengo y vivir con él».
En el campo del tratamiento, la cirugía y la radioterapia que actualmente se utilizan tienen también consecuencias negativas, como disfunciones urinarias, sexuales e intestinales.
El propio descubridor del PSA, Richard Ablin, firmó en The New York Times un artículo decisivo para abrir esta polémica. Con el significativo título «El gran error del cáncer de próstata», refiere Bellido, «Ablin dice que hay unos 30 millones de hombres estadounidenses haciéndose análisis de PSA toda su vida como consecuencia de los programas de cribado. Eso tiene un coste de 3.000 millones de dólares y lleva a diagnosticar muchísimos cánceres, pero sin que los niveles de mortalidad disminuyan. Es decir, que hay un sobrediagnóstico y un sobretratamiento».
40.000 al año
Ante esta relectura de la situación, las principales sociedades científicas internacionales han hecho nuevas recomendaciones y la unidad de servicios preventivos de los Estados Unidos conmina a no realizar el screening de próstata, la medida generalizada de diagnóstico precoz.
Las cifras estadounidenses, aplicadas a nuestra provincia, ilustra el médico Dionisio López Bellido, «se traducen en que 40.000 ourensanos están realizando anualmente pruebas preventivas cuya eficacia no parece clara y tienen efectos secundarios».
«Diagnosticamos mucho más y tratamos mucho más, pero no se reduce la mortalidad»
Dionisio López Bellido