Un castro abandonado a su suerte

javier taboada OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

PABLO ARAUJO

En Santomé, la oficina turística se encuentra cerrada y sin guías

21 ago 2012 . Actualizado a las 07:25 h.

A unos tres kilómetros del centro de Ourense, en una pequeña colina de Mende, se alza uno de los elementos arqueológicos más importantes de la capital. El castro de Santomé domina estos parajes en los que todavía se conservan varios cimientos de construcciones de la época.

El visitante que se acerca hasta estos restos castrexos se encuentra nada más llegar con una pequeña caseta de información turística. Algo que a priori debería ser un hándicap para conocer mejor la zona, se convierte en un elemento sin uso. En dicho punto, no se encuentra ninguna persona que ofrezca información al turista, ni tan siquiera folletos informativos. No obstante, si se pueden observar unos paneles en varios lugares, con una breve explicación del cometido de cada una de las construcciones.

La curiosidad por este paraje puede llevar al visitante a solicitar información en la oficina municipal de turismo, pero surge entonces una nueva sorpresa: no hay ningún folleto, ni información escrita del lugar para potenciar su visita. El resultado en pleno mes de agosto no puede ser más desolador: los turistas llegan con cuentagotas.

A pesar del abandono informativo, la zona si se encuentra en buen estado de conservación. Los caminos para pasear están limpios de maleza. No se observa tampoco ningún tipo de basura en los alrededores, aunque haya carencia de papeleras. Santomé, pese a todo, parece abandonado a su suerte. Sus vetustas edificaciones que un día albergaron población, se encuentran hoy vacías, ni un solo turista ni visitante en uno de los puntos más antiguos de la capital ourensana.