El de ayer era el primer pleno ordinario del mandato en la Diputación. Muchos diputados, como los dos del BNG, se estrenan en el cargo. Su portavoz, Xoán Xosé Jardón, alcalde de Vilar de Santos, destaca por la concisión y brevedad de sus discursos, algo que llamó la atención de toda la corporación, que prometió tomar ejemplo tras cuatro años de debates interminables. Tanto a él, como a su compañero, Leopoldo Rodríguez, edil en Celanova, les sorprendieron ciertas actitudes de los diputados. «Aquí esperaba algo máis de nivel», dijo el nacionalista celanovés, que comparó el pleno con su clase de secundaria por los reproches típicos del «y tú más» que se lanzan PP y PSOE. El caso es que en esta primera sesión ordinaria no hubo salidas de tono. De hecho, la reunión comenzó con las cariñosas bienvenidas de socialistas y nacionalistas al presidente José Luis Baltar tras superar la enfermedad que lo tuvo apartado de primera línea. «Como persoa deséxolle o mellor, pero como político, xa sabe, o peor», dijo entre risas el portavoz del PSOE, Ignacio Gómez. Plácido Álvarez, del PP, le dio después motivos para la segunda parte de su argumento al reconocer «algunha cacicadiña» de Baltar, nada comparable, matizó, con otras diputaciones socialistas en Andalucía.
«O presidente fará algunha cacicadiña de vez en cando contratando a alguén»
Plácido Álvarez