El pabellón de Os Remedios pierde socios por el estado de la instalación

OURENSE

20 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Inaugurado en 1969, el pabellón de Os Remedios ha sido a lo largo de sus casi cuarenta años de historia el centro deportivo de referencia de la capital. Su céntrica ubicación y la posibilidad de contar con una piscina cubierta le han servido en los últimos años para mantener el liderazgo en el ocio deportivo, pese al lento deterioro de las instalaciones. Sin embargo, la tendencia está cambiando desde el 2004. En los últimos tres años, el centro deportivo ha perdido abonados, bajando de los 6.500 a los 6.000 con los que cerró el ejercicio del 2007.

A la hora de buscar las causas de esta pérdida de confianza entre los deportistas de la capital, hay que acudir al estado de buena parte de sus instalaciones y al incremento de la competencia. Al margen de los gimnasios privados, el pabellón de Os Remedios tiene que competir desde hace unos años con otra instalación pública, en este caso de la Diputación: el Paco Paz. Con un gimnasio de mayores prestaciones y unos equipamientos más modernos, ha ido restando protagonismo al veterano centro deportivo.

La caída de abonados en Os Remedios preocupa a sus responsables. El gerente, Manuel Mosquera, tiene claro el motivo: «Na perda de socios ten unha influencia fundamental o feito de que a calidade do servizo que ofrecemos leva anos estancada». Por eso, desde su llegada al cargo de la mano del cambio político en el gobierno local se ha centrado en invertir esa tendencia. «Afrontamos obras de pura necesidade. Fixemos actuacións na piscina climatizada e na sala de musculación. Tamén se están instalando melloras ambientais nos vestiarios da piscina de 25 metros», indicó el gerente del Consello Municipal de Deportes.

El descenso en la afluencia de deportistas no impide que la piscina Rosario Dueñas, seña de identidad del espacio deportivo, siga sufriendo saturación en las horas puntas del día. El objetivo de la nueva gerencia es reequilibrar los turnos ofertando cursos para grupos que puedan acudir a otras horas. «Nos encontramos cunha tendencia na que se incentivaba o deporte de alta competición. Nós queremos buscar o equilibrio e pensar tamén na etapa de formación», explicó Manuel Mosquera.