«Decir que no coma carne al que pasó hambre, es difícil»

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Entrevista | Ana Gómez Alejandre Una charla sobre dieta sana sirvió para iniciar un programa sobre salud destinado a personas mayores y organizado por la Fundación Caixa Galicia

17 abr 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

?na Gómez apareció ayer en el Centro de Mayores de Caixa Galicia cargada con dos bolsas de la compra de las que sacó lechugas, zanahorias, leche, patatas y otros productos destinados a ilustrar su conferencia. Tiene un largo recorrido en cursos y talleres sobre nutrición y asegura que nada fija mejor los conceptos que la vista. -El método simplemente expositivo no es el más adecuado para transmitir algunos conceptos, sobre todo en algunos colectivos como el de las personas mayores, pero tampoco para la mayoría de la gente. Si yo hablo de alimentos energéticos, reguladores o plásticos, posiblemente pocos me entiendan. -¿Se logra con estas charlas el objetivo? -El problema es que los hábitos alimenticios se van adquiriendo durante la vida y luego es muy difícil cambiarlos. Cuanto más mayor eres, más te cuesta cambiar las costumbres. Lo que pretendemos es que entiendan cómo funcionan esos alimentos en su organismo y a qué patologías o enfermedades pueden llevar. Pero luego lo ideal es que acudan al especialista para que estudie cada caso y recomiende la dieta que es necesario establecer, dependiendo de su metabolismo, -A veces se dice que los mayores comían mejor que nosotros. -Quizá porque no tenían acceso a cierto tipo de alimentación que nosotros usamos cotidianamente, pero eso no significa que comiesen bien. Nuestra cultura es también de comer mucha cantidad y de muchos guisos y poca verdura. Y luego está la cuestión social. Decir que no coma carne al que pasó hambre es difícil, porque les cuesta renunciar a algo que ahora pueden permitirse y antes no podían. -¿Los pacientes mayores suelen llegar a las consultas de dietética? -Pocos. La mayoría son personas jóvenes, no sé si porque es gente que sabe que existimos como especialidad y consulta al médico de cabecera para que lo envíe. Lo que nosotros hacemos es, evitar enfermedades derivadas de una mala alimentación o establecer la dieta más adecuada si ya la tiene, pero siempre después de ser diagnosticado por el personal médico. -¿Hay patologías comunes en los mayores que podrían mejorar? -Seguro. Hay muchos problemas de distinta índole que tienen una relación con el tipo de ingesta que hace el paciente. El problema es que a veces se limitan a dar dietas genéricas, no ajustadas a cada caso, o darles medicación para paliar el problema. En Galicia todavía no somos una profesión arraigada y valorada como en otros lugares de España.