Oposiciones en la Diputación Gestores de pérdidas

La Voz

OURENSE

BUZÓN DEL LECTOR | O |

23 sep 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

Con relación a las afirmaciones del opositor a técnico de la Diputación de Ourense, Micael Suárez, en la que niega que yo sea su abogado, tengo que decir que él es el beneficiario del recurso contencioso-administrativo interpuesto y ganado por la «Asociación de opositores ourensanos (Asopo)». Micael Suárez Barra, se puso en contacto con la Diputación y se le comunicó que ya le llamarían para tomar posesión de la plaza. Vino a Ourense y alquiló un piso porque se le comunicó que iba a trabajar en septiembre. El vicepresidente de la Diputación dijo públicamente cuales eran sus intenciones. Por tanto, en la Diputación no le trataron correctamente. Suárez me llamó en el mes de julio para darme las gracias por todo lo hecho pues el trabajo del largo y costoso recurso contencioso redundó en su beneficio. Es de bien nacido ser agradecido. Yo no le represento procesalmente porque no me dio ningún poder, pero instando a la mayor brevedad, no puede desconocer que se actúa representado sus legítimos intereses personales. Quedó muy alarmado y sorprendido con las declaraciones del vicepresidente de la Diputación y necesitaba que alguien instase la ejecución de la sentencia, pues él, que no es abogado, desconocía tal aspecto procesal. Cuando se tuvo conocimiento de que en la Diputación no se le iba a dar posesión, yo, en representación de Asopo, traté de darle tranquilidad, se le dijo que era fácil sacarle la plaza y es fácil ejecutar una sentencia cuando hay un auto del TSXG ordenando que se ejecute. Y así se hizo. Es consciente Suárez (pues me dio las gracias), que Asopo está actuando en beneficio personal suyo, pero está entre dos aguas, y desgraciadamente sigue el dictado de la Diputación, que le perjudica y pudiera utilizarlo procesalmente en único beneficio de la Diputación. Curiosamente, el asesor jurídico de la Diputación, José Eugenio Galindo, le dijo a Suárez que se desvinculase de mí, lo cual es de lamentar, en lo personal. Es lamentable que se le hagan caso a las manifestaciones interesadas del asesor de la Diputación, -que únicamente quiere utilizar al opositor procesalmente, y hacerme daño a mí-, pues a quien le debe la plaza no es al PP -él es el único opositor desvinculado del PP- y a quien le debe la plaza es a Asopo a quien debería dar las gracias. Nadie debe morder la mano de quien le da de comer, lo cual es ingrato e innoble, y no es inteligente ponerse del lado de quien te está perjudicando. Pero así es el ser humano, y el sistema clientelar, contra el que es difícil luchar, produce estas situaciones impensables y de sumisión al poder. Pero aún así comprendo su situación personal, y se le tiende la mano para lo que necesite. El poder hay que respetarlo cuando se hace respetar, y un funcionario ha de ser imparcial y defender sus derechos individuales frente a la Administración, pues nada se le debe cuando se gana una plaza en una oposición libre. Si fuese por enchufe entonces sí, y quien te ha dado la plaza pide cosas a cambio. Pero si un funcionario que obtiene una plaza porque el TSXG ordena repetir una oposición, se supone que ese funcionario ha de ser imparcial pues no debe nada a nadie. Comprendo que es normal que Galindo aconsejase al Suárez desvincularse de mí, porque representando a Asopo tuvieron que repetir el proceso selectivo por segunda vez. Pero el principio de confianza legítima que ha de depositarse en la Administración, viene infringido por ésta, pues bien fácil le resultaba dar posesión de la plaza a su legítimo titular, por haber obtenido la segunda plaza en la oposición que se ordenó repetir. ¿Piensan en la Diputación que en el TSXG va a acordar otra cosa que no sea dar posesión a quien la ganó? Ahorrarían trabajo al tribunal cumpliendo lo que debenrse La deficiente actuación de la Diputación no puede considerarse justificada mediante alegación alguna de Galindo pues es preciso respetar legalidad y la pieza separada de ejecución provisional de sentencia que ordena repetir la oposición, y una vez ganada, el opositor aprobado ha de tomar posesión a la mayor brevedad. Eduardo Pérez Mazaira . Ourense Con las cuentas del Concello en alerta máxima, se avecina una nueva edición de despilfarro, el Festival de Cine, exponente de un intervencionismo vanidoso, y cuyo balance financiero parece de cómic. Solamente 4 ó 5 festivales internacionales acaparan atención mundial; tienen viabilidad. A otro nivel, quizás cada país podría permitirse el lujo de tener un evento digno; pero el colmo es que se multipliquen por todas las ciudades como ha ocurrido. La mayoría de ideas descabelladas fracasan al instante en el mercado privado, pero si se sostienen con dinero público pueden extenderse como un virus. Resultado: sólo en España hay más festivales de cine que en el resto de Europa (y en las mismas fechas que el de Ourense, se celebran otros dos más en España). El nuestro, con un coste que ronda los 400.000 euros y cuya venta de entradas no alcanza ni los 10.000 euros, arroja dos resultados: repercusión fuera de Galicia de un 0%, y la posibilidad para los ciudadanos de presenciar películas independientes, algo que con una mostra podríamos hacer por muy poco dinero. Para sus responsables el desfase de cuentas del festival es como una partida de monopoly (aunque en este caso no paga «la banca» sino el ciudadano). A los contribuyentes nos saldría mucho más rentable si a algunos dirigentes les asignan un sueldo a cambio de que no se les ocurra nada. . Ourense