Tan difícil...

José Francisco Sánchez Sánchez
Paco Sánchez EN LA CUERDA FLOJA

OPINIÓN

VATICAN MEDIA HANDOUT | EFE

10 may 2025 . Actualizado a las 10:46 h.

Unos esperaban un cónclave breve y otros, uno muy largo. Resultó como los dos últimos: fumata blanca el segundo día. Decían que de un cónclave saturado de electores seleccionados por Francisco saldría un clon del último papa, como si Francisco no hubiera sido escogido por hombres nombrados por Juan Pablo II (el propio Francisco) y Benedicto XVI.

Dicen que León XIV es centrista o progresista moderado o un continuista con matices que cuesta identificar. Se descartaba que el nuevo papa procediera de Iberoamérica o de Estados Unidos y que, los cardenales optarían por un europeo o, más probablemente, por un asiático. Pero se inclinaron por un norteamericano nacionalizado peruano y de ascendencia francesa y española. También se dijo que parecía muy improbable que perteneciera a una orden religiosa. El nuevo papa, en efecto, no pertenece a la Compañía de Jesús, pero sí a otra orden antiquísima: la de los Agustinos. Difícil acertar. La Iglesia gasta tantos siglos como nuestra era y atesora una sabiduría que nadie desprecia (despistados aparte), pero que solo se entiende del todo desde dentro.

La Iglesia institucional no coincide con la real, apenas la refleja, errores y pecados incluidos. Jesucristo la creó para transmitir su mensaje que, por definición, es operativo e inmutable. De ahí que se rija por criterios y dinámicas muy distintos de los que manejan las instituciones humanas, donde nadie espera la intervención del Espíritu Santo. León XIV es matemático y filósofo. Pero también se doctoró en Derecho Canónico. Le convendrá para fortalecer un aspecto decisivo: el sentido de la justicia que la Iglesia siempre ha demostrado, con excepciones contadas. Duro oficio el de los vaticanistas.