La cruzada de Juego de tronos nos heló la sangre con la amenaza de un invierno gélido y perpetuo que era preciso conjurar. Ahora que el aviso de un otoño espinoso anuncia un trance que habrá que pasar en el mundo real, la sombra de los dragones nos sobrevuela de nuevo. Las plataformas parecen temer tanto como nosotros que con la caída de las primeras hojas se vayan desprendiendo también espectadores que empiecen a contar cada céntimo que sale del bolsillo. De forma visionaria parecen haber reservado para estos meses algunas apuestas seguras con la esperanza de retenerlos a todos. Así van a poner competir a sus contenidos con más quilates, puras golosinas para los aficionados a las historias épicas y fantásticas.
Mañana en HBO empezará la prórroga de su producción más aplaudida con el estreno de La casa del dragón. Cómo dejar pasar la posibilidad de convertir en franquicia un éxito inconmensurable y aprovechar toda la experiencia adquirida en crear tramas fascinantes y bestias voladoras. Mañana se descubrirá si la nueva serie está a la altura de su legado. Prime Video, por su parte, estrenará en breve, poco antes de aplicar su subida de precios, la superproducción de El señor de los anillos: Los anillos de poder. Se remonta miles de años atrás en la historia conocida con el respaldo de los herederos de Tolkien y aspira a ser el germen de un nuevo universo legendario. Un otoño muy reñido se acerca.