Todos los «no es sí» de Pedro Sánchez

Roberto Blanco Valdés
Roberto L. Blanco Valdés EL OJO PÚBLICO

OPINIÓN

Emilio Naranjo | Efe

22 oct 2021 . Actualizado a las 12:45 h.

El líder del PP se hizo eco anteayer en el Congreso de las declaraciones de Arnaldo Otegi, en las que el exterrorista de ETA explicaba con meridiana claridad que los diputados de HB Bildu votarían los futuros Presupuestos para conseguir la libertad de los etarras en prisión: «Si para sacar a los 200 presos hay que votar los presupuestos, pues votamos». Más claro, agua.

Con lógica democrática impecable, Casado preguntó de inmediato al presidente del Gobierno si accedería a tal indignidad y el presidente, muy enfadado, como si contestar en el Parlamento no fuera para él una obligación inexcusable, replicó: «Señoría, respondiendo a su pregunta, es un ‘no' rotundo. Un ‘no' rotundo». Recordé al ver la escena por televisión, como lo rememoraron probablemente millones de españoles, otros ‘noes' rotundos de Sánchez tras haber entrado en la Moncloa a lomos del PSOE, Podemos, el golpismo catalán (ERC y PDECat), el separatismo vasco (PNV), los herederos de ETA (EH Bildu) y Nueva Canarias.

Sí, recordé cómo Sánchez prometió, en campaña electoral, que, de tener que gobernar con Podemos, «no dormiría por las noches, junto con el 95 % de los ciudadanos de este país que tampoco se sentirían tranquilos, incluso votantes de Unidas Podemos». Poco después Sánchez nombró a Iglesias vicepresidente segundo y ministros a cuatro miembros de su coalición.

Con superior rotundidad aseguró el presidente que jamás pactaría con Bildu: «Con el único partido, les anuncio, que no vamos a hablar y no vamos a entablar ese diálogo es con Bildu»; «No, yo con Bildu no me voy a reunir»; «Creo que esta pregunta ofende: les estoy diciendo que con Bildu no vamos a pactar. Si quiere se lo digo cinco veces o veinte, durante la entrevista. Con Bildu no vamos a pactar. Con Bildu, se lo repito, no vamos a pactar»; «En el Partido Socialista de Navarra y el PSOE tenemos la misma posición. Y es que con Bildu no se acuerda nada. Si quiere, se lo repito otra vez». Todo eso dijo Sánchez en diferentes ocasiones, el mismo Sánchez que ahora gobierna con el apoyo de los sucesores de ETA.

El líder del PSOE manifestó también: «Los líderes independentistas no son de fiar». Y se refirió así a los dirigentes de ERC y a Puigdemont: «A los líderes independentistas habrá que reprocharles que no han actuado de buena fe, que han engañado». Hoy ERC es el socio preferente del Gobierno.

En fin, porque el listado es apabullante, el presidente proclamó solemnemente en la Moncloa, en octubre del 2019, en una declaración institucional sobre el indulto a los presos del procés, que «el acatamiento de la sentencia implica su cumplimiento. Reitero, significa su íntegro cumplimiento». Y repitió hasta la saciedad que jamás habría perdón («Quiero garantizar a la ciudadanía que la sentencia se va a cumplir») para quienes están desde junio en libertad.

¿Es de fiar el nuevo ‘no' rotundo del presidente a un infame cambalache?: ¡Presos por Presupuestos! El lector, visto lo visto, puede responder esa pregunta, que no cabe imaginar más alarmante.