Necesidades básicas

Ignacio Bermúdez de Castro
Ignacio Bermúdez de Castro PASOS SIN HUELLAS

OPINIÓN

21 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

entre los españoles, como entre los de Pernambuco, hay de todo como en botica. Un hombre se salta el cierre perimetral para ver a su pareja y alega que el sexo es una necesidad básica, como el comer. Comprendo que para algunos, ahí la edad influye mucho, es preferible no haber ingerido alimento alguno en una semana que llevar sin sexo 24 horas. Cada uno, en situación de normalidad ciudadana, es dueño de dar preferencia a un buen revolcón que a un suculento chuletón de buey. Pero esa opción solo puede darse en una situación de normalidad ciudadana, en la cual no estamos. Por eso el hombre se quedó sin compartir intimidad con su amada, y posiblemente sin cien euros. Y ahora seamos serios. Al que más y al que menos nos gusta el sexo. Pero si la providencia, no la divina sino la otra, te ha castigado con estar domiciliado en lugar distinto al de tu compañero o compañera de cama no queda otra que ajo y agua, y no pretender hacer pasar por tonto al agente de la autoridad de turno. Cierto que vivimos en el país que parió al Lazarillo y al Buscón. Pero la situación sanitaria es tan dramática que estas situaciones, una vez pasados los primeros diez segundos en que la noticia te sorprende, tienen que dejar de ser graciosas. Por eso al susodicho solo le queda abstinencia sexual y la opción del precitado chuletón de buey. Y si después de los cien euros que le habrán impuesto de multa no le restara para tan suculento manjar siempre hay, en cualquier supermercado que se precie, algún sucedáneo más económico que sacie su apetito, entendido este como sensación de hambre o ganas de comer. El otro, el apetito sexual, desgraciadamente para muchos tendrá que esperar a que lleguen tiempos mejores. Como tantas otras cosas.