«Estoy hasta los cojones de todos nosotros», dijo Fran Carrillo, diputado de Ciudadanos en el Parlamento andaluz, parafraseando al que fuera presidente de la Primera República, Estanislao Figueras. La frase, que pronunció tras conocerse los pactos de su partido con el PSOE, le salió del alma a Fran Carrillo, y le llegó al alma a miles de conciudadanos que observan cómo la preocupación de los políticos profesionales está relacionada directamente con su ansia de poder. Poco les preocupan los muertos del covid, los enfermos, los parados, las separaciones de padres e hijos... Eso no les preocupa nada. Se ponen de acuerdo en destronar a sus contrincantes pero son incapaces de pactar las medidas sanitarias contra el covid. Pues sí, hasta los mismísimos.