Curar la vejez

Manuel Luis Casalderrey
Manuel-Luis Casalderrey RINCÓN ABIERTO

OPINIÓN

29 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay investigadores, empresas y magnates buscando el elixir de la eterna juventud. Están empeñados en evitar el envejecimiento de las células con el fin de mantener a los seres humanos siempre jóvenes, curando, por lo tanto, el envejecimiento.

Se han encontrado células cancerosas que pueden cultivarse en el laboratorio indefinidamente, de forma que parecen inmortales. Por suerte también hay otras células, benignas, que comparten con las cancerosas la propiedad de no deteriorarse. Son las espermatogonias (se transforman en espermatozoides) y las oogonias (se transforman en óvulos). Además hay bacterias que pueden reproducirse indefinidamente si cuentan con recursos adecuados y, por lo tanto, nunca morirán de viejas. Las hidras (pequeños invertebrados de agua dulce, pueden vivir hasta 1.400 años) y algunas medusas poseen la capacidad de ir reemplazando las células viejas por otras nuevas. Esto supone un cierto grado de inmortalidad. Los científicos estudian cómo se producen esos procesos para intentar replicarlos.

Los telómeros son los extremos de los cromosomas. Con el tiempo se van acortando y se cree que eso provoca la incapacidad de las células para reproducirse y, por lo tanto, su muerte. Por ahí llega el envejecimiento. La telomerasa, descubierta por los Nobel de Medicina del 2009, es una enzima que agrega ADN a los telómeros, impidiendo su acortamiento y buscando curar el envejecimiento.