Los amantes de los concursos de preguntas y respuestas, esos que permiten jugar desde casa y familiarizarse con genios anónimos a los que uno acaba llamando por su nombre de pila, tenían que afrontar cada tarde una difícil decisión: elegir si querían más a ¡Boom! o a Pasapalabra. No era fácil. Muchos tenían su favorito, pero muchos verían los dos. Por veteranía y popularidad, el programa del rosco fue durante mucho tiempo el líder imbatible, pero poco a poco el espacio de las bombas logró hostigarlo y ponerse a su altura cuando Los Lobos hicieron historia. A partir de la próxima semana, quienes dispongan de tiempo y ganas podrán enlazar un concurso detrás de otro en Antena 3, que ha conseguido aglutinar cada tarde a los dos grandes titanes de los enigmas televisivos. Encadenar, uno tras otro, Ahora caigo, ¡Boom! y Pasapalabra, como quien se atiborra de capítulos de una serie. Solo le falta para redondear la apuesta el modesto Saber y ganar de Jordi Hurtado, de premios menos espléndidos por ser de La 2, pero toda una institución de este género.
Si algo ha demostrado esta pandemia que nos confinó en casa es que el entretenimiento es también servicio público. Y los concursos, que están en la televisión desde el principio de los tiempos, no han encontrado todavía mejor plataforma que las cadenas en abierto y para todos.