El mundo de los virus

Jaime Gómez Márquez TRIBUNA

OPINIÓN

NIAID-RML

20 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

En 1977 Jean and Peter Medawar definieron, muy gráficamente, a los virus como «un conjunto de malas noticias envueltas en proteína» (New York Times 3/4/20). Todos sabemos que los virus son agentes infecciosos causantes de numerosas enfermedades y tenemos múltiples ejemplos de ello como el virus de la gripe, el del ébola, el de la varicela, el del papiloma humano, el del sida, el de la hepatitis, etcétera. Ahora los virus vuelven a estar de máxima actualidad por la pandemia provocada por el coronavirus causante de la COVID-19.

¿Qué son los virus? Son parásitos intracelulares obligados ya que no realizan ninguna función vital fuera de las células. Cuando entran en las células (infección) utilizan la maquinaria celular para generar nuevos virus (replicación). Dos ejemplos: el coronavirus que infecta a células del tracto respiratorio superior donde se replicará para generar nuevos coronavirus apareciendo los síntomas de la enfermedad, y el virus del SIDA (el VIH) que produce una inmunodeficiencia severa al atacar a unas células específicas del sistema inmune lo cual reduce las defensas de nuestro organismo contra los agentes infecciosos.

¿Cómo es un virus? Un virus es una minúsculas partícula, mucho más pequeña que una célula. A modo de ejemplo las partículas del virus de la gripe A son esféricas y tienen un diámetro entre 80-120 nm (nm es la abreviatura de nanómetro y 1 nm equivale a 0.000000001 metros). Los virus pueden tener formas y componentes muy variables pero siempre están formados por una cubierta exterior de naturaleza proteica que protege al genoma viral.

Para gran parte de la comunidad científica, los virus no se consideran seres vivos porque no tienen estructura celular que es una característica fundamental de todos los organismos que habitan nuestro planeta (bacterias, arquebacterias, plantas, animales y hongos). De hecho, cuando un virus está fuera del hospedador es una partícula inerte pero cuando infecta una célula le transmite un único mensaje: fabrica más virus o déjame estar «confortable» en tu interior (en este caso el virus permanece latente, como dormido, dentro de la célula pero sin matarla).

Los virus tienen un material genético propio cuya naturaleza química es idéntica al de cualquier organismo terrícola. Incluso algunos virus cuando infectan pueden integrar su genoma en el del huésped (nuestro genoma está plagado de genomas virales adquiridos durante la evolución de nuestra especie). Los virus tienen la capacidad de evolucionar (de cambiar o mutar), algo que es consustancial a la vida desde que esta se originó hace aproximadamente 3.000 millones de años. En mi opinión, los virus sí son seres vivos porque tienen genoma propio y capacidad de evolucionar. Además, es muy evidente que han jugado un papel fundamental en la evolución de las especies a través de la transferencia genética horizontal.

¿Cómo combatimos a los virus? Nuestra defensa natural contra los virus es nuestro sistema inmune que puede reconocerlos como agentes extraños y desarrollar una respuesta cuya finalidad es neutralizar al virus y eliminarlo. Mediante las vacunas podemos activar preventivamente nuestras defensas naturales generando anticuerpos contra los virus. En nuestra respuesta a la infección viral también juega un papel importante la variabilidad genética porque aunque seamos de la misma especie no todas las personas son idénticas; esta variabilidad explica porqué unas personas son más susceptibles que otras a la infección viral. Otra forma de combatir a los virus es el empleo de fármacos antivirales que son sustancias que interfieren el ciclo vital del virus impidiendo que se repliquen o infecten las células; los antibióticos no son antivirales porque no sirven para atacar a los virus debido a que carecen de estructura celular. Los virus pueden ser beneficiosos utilizándose como vectores en terapia génica o como agentes letales en la guerra biológica contra las bacterias (hay virus específicos de bacterias que llamamos bacteriófagos). Sin duda la investigación básica y aplicada en el ámbito de la Virología nos permitirá conocer mejor a los virus desde un punto de vista biológico y como consecuencia de ello desarrollar mejores herramientas para combatirlos.