2019 es el año de Blade Runner. Como en la película, vivimos en un mundo contradictorio en el que la tecnología amenaza al progreso y en el que los valores humanos naufragan en incertezas. En el 2019 hay elecciones en España, y los candidatos miden sus debilidades y sus fortalezas ante el ojo que todo lo ve. Del debate quedan dos imágenes: la de las limpiadoras y la del después.
La primera fue antesala del último dato del paro, que castiga especialmente a las mujeres en plena efervescencia del 8M. El desempleo en el primer trimestre del año se cebó con 53.600 trabajadoras, en tanto que bajó para 3.700 trabajadores. Pese a tanta palabrería feminista, ellas tienen las de perder. Ellas tienen miedo. Con la EPA llegó también un informe que dice que la mitad de los empleos serán ocupados por robots. Ellos también tienen miedo.
La segunda escena es un vídeo de los candidatos una vez finalizado el debate. Pablo Iglesias, Pablo Casado y su mujer hablan de sus hijos y el primero le enseña al matrimonio las fotos de sus mellizos. Al dirigente de Unidas Podemos y al del Partido Popular les une un temor; el de la salud de sus retoños, nacidos prematuros. A Albert Rivera le delata su nerviosismo; es el miedo a perder. Y Pedro Sánchez sabrá cuáles son sus temores, pero las canas del presidente delatan sinsabores tras una fachada de perfecto replicante.
No solo ellos representan a más de 46 millones de españoles, ni son los únicos a los que un día les estremeció el miedo. Cristina Pérez, candidata de En Marea por Lugo, decidió dar el paso a la política activa conmovida por las historias de vidas rotas que escuchó tras un mostrador de las oficinas del paro, y la sombra de la discriminación al colectivo LGTBI llevó a una joven transexual de Mallorca a dar el paso y presentarse a las elecciones autonómicas.
El año del futuro es también un poco el año del pasado. Nunca tanto España se pareció a la de la generación del 98; entonces se desmoronaba el imperio en el que nunca se ponía el sol y ahora se tambalean las ilusiones con las que se construyó una democracia. Miedos colectivos.
Pero queda mucha historia por vivir y el domingo en las urnas escribiremos un nuevo capítulo. «El miedo es natural en el prudente, y el saberlo vencer es ser valiente», decía el escritor Alonso de Ercilla y Zúñiga. El 28 de abril es San Prudencio. ¿Quién dijo miedo?