La sanidad tiene un mal multifactorial. Y ha sido suficiente «el aleteo de una mariposa» en la atención primaria del área de Vigo para que lo negado hasta ahora se haya convertido en evidencia. El marco de gestión actual arranca de la segunda reforma sanitaria, iniciada en 1991 con aquel Informe Abril, que proponía introducir criterios económico-empresariales. Se inicia en la ley de 1997, y se desarrolla con leyes y decretos del 2003. Con la reforma se implanta la autonomía de gestión de centros y áreas, y otros afanes, se introducen las áreas sanitarias (EOXI) de centralidad hospitalaria, en detrimento de la gestión en atención primaria, y se desarrolla una gestión de personal desenfadada. Se consolida también un cuerpo de gestores, de los que más del 89 % son médicos y el 81 % de género masculino. En España el 54 por ciento de los gerentes de la sanidad pública son nombrados por los cargos políticos, observándose una alta tasa de rotación en los nombramientos, según la Sociedad Española de Directivos de la Salud (2018). Criterios de gestión que en tiempo de crisis han priorizado la reducción en el gasto en personal y en el de farmacia, que suman el 70 % de los recortes que se han efectuado.
En Galicia a ello se añade un marco organizativo, donde a lo intrincado de las competencias dentro de la Consellería de Sanidade (enredadas entre Sergas, Axencias, Galarias, EOXI de centralidad hospitalaria…) se suman sorpresivamente las asumidas por la Consellería de Facenda, con dos Servicios en Materia Sanitaria, uno de ellos de Costes de personal. ¿Necesidad o querencia? La escasez de médicos en primaria y pediatría se diagnosticó hace años, en un borrador del Plan de Ordenación de Recursos Humanos del Personal Estatutario del Sergas, al parecer olvidado.
En el año 2016 había en España unos 248.000 médicos colegiados, creciendo en 4.000 cada año. Y entre 2009 y 2017 entraron en la formación mir 58.000 médicos, 7.000 al año. La mitad de los 104.000 presentados, debido a la escasez de plazas no dotadas por las autonomías.
Lo que no contradice que la temporalidad alcance un 23 % en Galicia y un 19 % en España. No hay Registro Estatal de Profesionales Sanitarios. El Ministerio de Sanidad había prometido tenerlo accesible el 23 de diciembre del 2018. Tal día como hoy. Veremos. El 40 % del presupuesto de la Xunta merece más debate y mejor gestión.
Los cambios de argumentos ante cualquier conflicto en la sanidad justifican el escepticismo.