Que nos salven

Tamara Montero
Tamara Montero CUATRO VERDADES

OPINIÓN

30 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«No hables de Franco, a ver si me va a pasar algo». Una mujer, al otro lado del teléfono, impone cordura. Un poco de cordura en una tarde de absoluto delirio en la televisión española. En realidad, nada nuevo. Apenas otro día más en la sobremesa de las ondas catódicas. Una tarde más escarbando en los vertederos para presentar los desechos más inmundos que puedan encontrar ante la audiencia que, acrítica, se traga todo lo que le cuentan. La impúdica exposición de la nada. Horas del vacío moral más absoluto. Otra tarde más jaleando la incultura. Elevando a los altares la ignorancia recalcitrante y orgullosa.

No hables de Franco, a ver si me va a pasar algo. La madre de la presentadora resumiendo cuarenta años de terror en una sucesión de doce palabras. Un destello en este contenedor de basura que vale un millón de euros de multa. Que todavía se atreve a acusar a la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia de hipocresía. Que emite contenidos de carácter sexual a la hora de la merienda. Y que después desvía el foco porque los menores pueden entrar en Internet y ahí también hay mucha mierda. El mismo programa que hace dinero removiendo en la podredumbre, haciendo negocio con la miseria. Que hiere sensibilidades de niños y también de adultos y no se despeina. Las tardes son desde hace tiempo insoportables. Que nos salven ya de esta vergüenza.