Acaba de publicarse el barómetro de octubre del CIS y lo primero que tenemos que considerar es que este estudio está realizado en los días inmediatamente posteriores a la votación del 1-O que el Gobierno no pudo impedir en Cataluña. Desde que se hizo este trabajo, hasta hoy, se ha producido el desenlace de todas las tensiones entre los gobiernos de Cataluña y de España, luego nace anticuado porque no recoge sucesos de verdadero impacto electoral casi todos posteriores a su realización. Nos referimos a la independencia de Cataluña no se sabe si declarada pero suspendida del día 10 de octubre y al escríbamelo usted de Rajoy del día 11 miércoles, siendo posteriores la callada por respuesta de Puigdemont del lunes 16 o la independencia no declarada del viernes 27 de octubre que le sirvió al Gobierno para formalizar el intento secesionista ese mismo día y así suspender la autonomía, disolver las cortes catalanas y convocar las elecciones del 21D, que aunque fueran forzadas significaron el alivio de muchas de las tensiones. El estudio del CIS queda muy lejos de los autos de prisión de los Jordis, del líder de ERC Oriol Junqueras y de la mitad del Gobierno catalán cesado, y más lejos aún de la otra mitad que está con Puigdemont en Bruselas.
En cualquier caso, el barómetro de octubre del CIS es plenamente coincidente con nuestras estimaciones de primeros de octubre en lo que respecta a las posiciones del PP y Ciudadanos en los entornos del 28 % y el 18 %, respectivamente, totalizando el 46 % de los votos válidos para el lado derecho del sistema electoral. Lo que viene a significar un retroceso de 1,4 millones de votos del PP, desde los 7,9 millones del 26J hasta los 6,5 millones de este barómetro de octubre, que se compensa en parte con la progresión de Ciudadanos hasta los 4,1 millones de votos que sugiere el CIS para una participación del 68 %, un millón más de los que obtuvo este partido el 26J.
En el lado izquierdo, el CIS estima al PSOE en el 24,2 %, que equivale a 5,6 millones de electores, doscientos mil más que el 26J, y en el 18,5 % al conjunto de partidos de Unidos Podemos y las confluencias, 4,3 millones de electores que son ochocientos mil menos que en aquellas elecciones.
Esto totaliza en el lado izquierdo del sistema el 42,7 % de los votos válidos y es un valor relativamente estable. Respecto a los datos estimados por el CIS para las demás formaciones políticas, una muestra de 2.400 entrevistas diseñada para el ámbito estatal es muy imprecisa y se requiere de otros elementos de análisis cuantitativo para realizar estas estimaciones.
En definitiva, la estimación del barómetro de octubre del CIS es perfecta respecto de las tablas de resultados y sus medidas son suficientemente precisas, pero la crisis planteada en Cataluña está produciendo cambios en el comportamiento electoral de las personas en toda España.
Quizá el barómetro de enero del 2018 obtenga sus datos en una situación más estable y sepamos qué relación de voto queda entre el PP y Ciudadanos en el lado derecho, y qué otra entre el PSOE y Unidos Podemos y las confluencias en el izquierdo.