Ojo por ojo

Ernesto Sánchez Pombo
Ernesto S. Pombo EL REINO DE LA LLUVIA

OPINIÓN

13 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Las trifulcas que vienen protagonizando nos indican que los socialistas gallegos tienen dos opciones en el horizonte. Sacar un mal resultado en las autonómicas gallegas de octubre o sacar el peor resultado de la historia en las autonómicas gallegas de octubre, a imitación de lo que acaba de hacer en España su gran y carismático líder, Pedro Sánchez.

La elección de un senador, la formación de candidaturas y los vetos y acusaciones realizadas no son más que otra batalla de la guerra que se libra desde hace años en el seno de los pesedegás. Quienes ahora acusan a Leiceaga de colocar a sus amigos pudieron hacerlo con Pachi Vázquez, que fue el que inició el modelo, y con Gómez Besteiro, que consintió y permitió lo que es difícil de imaginar. La cultura del colegueo y amiguismo no es nada nuevo, por mucho que diga la gran pensadora Carmen Gallego, y se ha cultivado con extraordinario éxito en los últimos años.

El PSdeG entró en la deriva tras perder el Gobierno de la Xunta y parece empeñado en no volver a recuperarlo; porque el objetivo que se marcan sus dirigentes y sus cargos relevantes no es volver a gobernar, sino destrozar al compañero. El propósito último es derrotar al de al lado porque él así lo hizo en una batalla anterior, y lo primordial es pasar factura y dejar claro quién es el más fuerte. El valor del ojo por ojo.

No se crean eso de que los socialistas gallegos han aparcado su división hasta las autonómicas. La división y los enfrentamientos forman parte de su ADN y la guerra permanente les da vida, por mucho que Nietzsche dejase dicho que «la guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido». Pero no se quieren enterar.