España inteligible

OPINIÓN

07 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Quienes perdieron el 26J están terriblemente cabreados. Abundan las faltas de respeto, las expresiones de rabia y rencor hacia los votantes del Partido Popular en las redes sociales, en artículos de prensa, en tertulias. Una postura dogmática e intransigente, que parte de la idea de que quien no piensa como yo está en el error o en la ignorancia más absoluta. Craso error.

«Este es un país de mierda, los corruptos del PP van a acabar con las pensiones, si esto sigue así yo hago las maletas...». Y adónde vas, pregunto yo. ¿A Austria, que tiene que repetir elecciones por serias irregularidades en el recuento de votos y donde puede ganar la extrema derecha? ¿A la Francia de Hollande, que le iba a enseñar a Europa que las cosas podían hacerse de otra manera y ahora -tarde, mal y a rastras- aplica las mismas recetas que Rajoy aplicó en España? ¿Al Reino Unido, cuyos dirigentes políticos han generado un problema monumental y ahora se dan el piro como adolescentes irresponsables? ¿A la Italia de Renzi, cuyos bancos tienen que ser rescatados como lo fueron los nuestros? ¿A la Grecia que recorta las pensiones públicas, que necesita del dinero de la UE para seguir funcionando?

En fin, yo sigo cultivando mi paz interior leyendo los admirables libros de Unamuno, Ortega y Julián Marías: Ensayos sobre el casticismo, España invertebrada y España inteligible. Ojalá que Pedro Sánchez los tuviera también en su mesilla de noche.