Dúo de equilibristas

Ernesto Sánchez Pombo
Ernesto S. Pombo EL REINO DE LA LLUVIA

OPINIÓN

20 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Al igual que aquellos trapecistas que entretenían nuestra infancia con sus acrobacias imposibles, Rajoy y Sánchez realizan trabajosos malabarismos en un intento de salvar su futuro político. Se mueven sobre un trapecio volante que los lleva y los trae en función del momento, pero sabedores de que solo podrán abandonarlo por la única salida victoriosa: la Moncloa.

Porque tanto el presidente en funciones como el líder socialista tienen el futuro diseñado. O se hacen con la presidencia de España o se dedican a otros menesteres, porque sus opciones no pasan precisamente por otra oportunidad en las urnas; incluso tampoco en el caso de que hubiera que repetir los comicios en mayo.

Las situaciones de Rajoy y Sánchez tienen gran similitud. Casi la mitad de sus votantes prefieren a otros candidatos; son los dos políticos con una más raquítica valoración popular; están siendo cuestionados desde sus propias filas y, en ambos casos, se trazan estrategias que les insinúan que no son bien recibidos, como pedir primarias de forma reiterada. Y aun más. Mientras uno exhibe una hoja de servicios con tres millones y medio de votos menos y un tercio de los diputados perdidos, el otro cosecha los peores resultados de la historia de su partido.

Así que cualquier decisión que tomen pasará por no caerse del trapecio. Y nosotros aguardando ilusionados a ver quién gestiona nuestras vidas los próximos años. Como ese náufrago en medio del océano que duda entre agarrarse a una boya o a un patito flotador.