Libros, libres

César Casal González
César Casal CORAZONADAS

OPINIÓN

21 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Estamos en la semana de los libros. Aunque todos los días deberían ser días del libro. O noches del libro. Qué a gusto se lee por las noches, arrebujado entre las sábanas de la cama. Los libros nos hacen más libres. Es también la semana de las librerías. Las librerías son espacios únicos. Tenían que estar protegidos. Las librerías son parques naturales de la inteligencia. Es terrible que cada vez haya menos. Es la prueba de que algo va muy mal. Según un estudio reciente, en España se cerraron casi mil librerías, aunque abrieron más de doscientas. Malos números, para un sector que cada vez factura menos. Pero no es todo culpa del oceánico Internet ni de las pantallitas. No. Es culpa de que en este país hay un 55 por ciento de seres humanos que no tienen rubor en contestar a una encuesta que jamás leen un libro. Y que no lo hacen, añaden, porque no les interesa lo más mínimo. Esta semana, con regala un libro y una rosa, es el momento de poner el grito en el cielo por ese salvaje porcentaje de gente que es feliz sin tocar un libro. Una pena. Los libros no van con ellos. Hay un infinito en los libros. Un infinito de conocimiento. De diversión. De fantasía. De bondad. De maldad. Todos esos infinitos se los pierden, porque a ellos los libros les dan exactamente igual. Dice Javier Marías que la gente que se atreve a decir estas cosas son en realidad como muebles. Taburetes, para ser exactos. Y no le falta razón al escritor. Estamos en la semana de los libros. Un libro es lo único que te da felicidad que puedes cogerlo y dejarlo cuando quieras.