Encrucijada palestina

Gonzalo Parente VENTANA AL MUNDO

OPINIÓN

02 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El reconocimiento del Estado palestino se ha vuelto a reavivar debido a varias declaraciones de importantes políticos europeos: El Primer Ministro sueco, el Parlamento británico y el Ministro de Asuntos Exteriores francés, todos ellos pidiendo que se reconozca la independencia palestina en Israel. Esto debería servir de un fuerte empuje a la solución de este eterno conflicto que está en el corazón de la comunidad islámica. Pero la reacción de Natanyahu ha sido, autorizar mil nuevos asentamientos en Jerusalén árabe, y la postura de EE.UU., de que todo se tiene que solucionar con negociaciones.

De esta forma el conflicto sigue bloqueado, por mucho que se pida a Israel internacionalmente que los palestinos tienen derecho a su propio Estado. El problema añadido es que los palestinos están divididos, entre quienes reconocen a Israel (Al Fatah) y quienes quieren destruirlo (Hamas). Así, aunque se unan las dos facciones, Israel siempre tendrá el motivo para no negociar. Por eso cada vez es más difícil, porque se autorizan nuevos asentamientos en territorios palestinos, que en caso de independencia tendrían que ser abandonados. Así, con Israel enrocado; con los palestinos divididos y con EEUU apoyando a Israel, se comprende que este conflicto solo tendrá solución cuando Hamas desaparezca y EEUU, presionado por la comunidad árabe, deje de apoyar a Israel. Lo que pasa es que también la comunidad árabe está fragmentada, como lo demuestra la situación de la lucha contra ese nuevo actor que es el estado islámico.