Premonición de Norberto Bobbio

OPINIÓN

29 oct 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

Era una mañana de 1983 en una terraza de la romana Piazza Navona. El filósofo Norberto Bobbio y quien firma hablaban de España, de moda por su transición democrática. El ensayista italiano, profesor y teórico del pensamiento político, se deshacía en elogios hacia los españoles por el ejemplo que estábamos dando al mundo.

Tras ensalzar al rey, a los políticos de la transición y al pueblo español, y satisfacer mínimamente su inmensa curiosidad, uno de los grandes analistas políticos del siglo XX preguntó: «Todo lo están haciendo ustedes admirablemente, pero dígame una cosa que no entiendo, ¿por qué han transferido la educación a las comunidades autónomas?». Tras reflexionar la respuesta, le contesté con las estupideces que justificaban en aquellos tiempos ese y otros traspasos. «Porque el factor de proximidad favorecerá una educación más cercana, porque las comunidades ejercitarán esa facultad con más celo y medios, porque?, porque?». Bobbio, con cara de estupor, me respondió muy serio: «Si una nación quiere permanecer unida, tiene que enseñar la misma Historia a todos los escolares». Y añadió, «aunque sea falsa».

Treinta años después, la aseveración del senador socialista se ha convertido en fatal premonición. Esa semilla del mal ha fructificado con Gobiernos secesionistas; es evidente que, como dijo Peces Barba, Jordi Pujol, Javier Arzallus y los que se dicen sucesores de Carrillo han sido desleales al pacto constitucional que firmaron; los dos primeros tenían diseñado un camino hacia la secesión, consiguieron en las constituyentes lo que se propusieron y sembraron de trampas el recorrido democrático español, como la Ley Electoral. Y la ambición de PP y PSOE para gobernar aun a costa de gravosos peajes a los independentistas, mas la pérdida de identidad nacional del partido socialista, nos han traído hasta aquí.

Con la actitud acomodaticia de PP y PSOE y la claudicación del Estado vía Tribunal Constitucional y otras instancias, PNV y CiU han quemado etapas hacia su objetivo final. La premonición de Bobbio se cumple. ¿Españolizar a los escolares? ¡Pues claro! Con urgencia y sin más cesiones.