DE CABALLERO A VILLANO

La Voz

OPINIÓN

PERSONAJE SLOBODAN MILOSEVIC

28 jun 2001 . Actualizado a las 07:00 h.

El otrora topoderoso presidente serbio y yugoslavo Slobodan Milosevic fue finalmente entregado ayer al Tribunal de La Haya con nocturnidad, premeditación y alevosía. Fue precisamente el Gobierno serbio el que lo puso en manos de la Justicia internacional, desoyendo la orden que horas antes había dictado el Tribunal Constitucional yugoslavo de dejar en suspenso la decisión tomada el sábado por el Gobierno de Kostunica que accedía a la extradición. Milosevic se encuentra desde anoche en el centro penitenciario de Schveningen, donde están a buen recuerdo antiguos aliados suyos. La sombra de Estados Unidos ha sido una vez más alargada. La amenaza de no asistir hoy a la primera conferencia internacional de donantes para Yugoslavia si no se accedía a la extradición del ex-dictador ha pesado demasiado. Atrás quedan los tiempos en que Washington, y Occidente por extensión, miraban a Milosevic como un caballero. Así estaba considerado en 1994 cuando logró que los ultranacionalistas serbios de Bosnia liberaran a los 400 rehenes que habían tomado, pero volvió a convertirse en villano a partir de marzo de 1998, cuando no cedió en Kosovo. Jurista de formación -fue uno de los alumnos más brillantes de Derecho en Belgrado-, Milosevic, de 60 años, ascendió los peldaños de la nomenklatura de su país jugando a la vez la carta del comunismo y del nacionalismo.