Así está el urbanismo en Lugo: 26 trabajadores y 250 licencias concedidas en el 2020

Lorena García Calvo
lorena garcía calvo LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

ALBERTO LÓPEZ

Los permisos concedidos movilizaron un mínimo de 30 millones de euros

21 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El área de Urbanismo del Concello de Lugo, ahora englobada en Desenvolvemento Sostible, lleva tiempo en el punto de mira por la falta de agilidad a la hora de conceder licencias y tramitar los asuntos que le competen. Desde diversos ámbitos se ha reclamado al Concello mayor celeridad, y el gobierno asegura que está poniendo los medios necesarios para conseguir desatascar un área especialmente delicada. Pero, ¿cuál es la situación?.

¿Cuántos trabajadores están adscritos al área?

Arquitectura, Licencias y Urbanismo son las tres secciones en las que se distribuye el área, y en ellas trabajan 26 personas. En Arquitectura hay un jefe de servicio, un adjunto, cuatro arquitectos (cuando llegó Méndez eran 2 y ahora son 5), un jefe de negociado delineante, un oficial supervisor y dos auxiliares administrativos. En Licencias hay un jefe de servicio, un jefe de negociado, dos administrativos y cuatro auxiliares administrativos. En la sección de Urbanismo está el jefe del servicio, un jefe del grupo de planeamiento, un técnico de administración general de la disciplina, un jefe de negociado de la disciplina, un auxiliar administrativo, un adjunto de servicio de gestión urbanística y un jefe de grupo de gestión urbanística.

¿Cuántas licencias concedieron en el 2020?

La lentitud en la concesión de licencias es lo que más se le está recriminando al Concello. Los datos recogidos por el PP en base a las actas de las juntas de gobierno reflejan que a lo largo del año 2020 el servicio concedió un total de 250 licencias, 88 correspondían al rural y 162 eran de urbana. De las 250, solo 35 se tramitaron dentro del plazo de 90 días que establece la ley, aunque esto no es solo achacable al servicio, puesto que también depende de la agilidad de los ciudadanos para entregar la documentación completa o para enmendarla, si cuando la presentan no está toda correctamente. Además, puede ser necesario reunir documentación de otras áreas, y todo esto alarga el proceso.

¿Qué volumen de dinero suponen esas licencias ?

Cuando un ciudadano solicita una licencia, lo hace para obtener un beneficio, ya sea habilitar un ascensor en su vivienda o construir una granja con la que poder montar una actividad económica. Pero, la importancia de sacar adelante los permisos va más allá, puesto que llevan aparejados una actividad económica importante. Las 250 licencias concedidas el año pasado movieron, de partida, más de 30 millones de euros. Concretamente, las urbanas suponían un volumen de negocio de 23 millones y las de rural partían de 9,5.

¿Cómo se desglosaron las licencias concedidas?

Las licencias urbanas se desglosaron de la siguiente manera: 48 para ascensores, ya fuese instalarlos o hacerlos accesibles; 16 para edificar; 52 para reformas, 4 para tejados, 2 para obras y 40 para otras, ya fuesen cambios de uso, legalizaciones, etc... En cuanto a las licencias del rural, 35 fueron para construcciones agroganaderas, 23 para viviendas y 18 para la reorganización de parcelas.

¿Cómo quiere solucionarlo el Concello?

El Concello atribuye los problemas a la hora de desatascar las licencias a la falta de personal, derivada en buena medida de la limitación a la hora de cubrir vacantes. Con la aprobación de la RPT municipal, la redacción de las listas de empleo para sustituciones, la implementación de protocolos que sean conocidos por la ciudadanía y la administración electrónica esperan mejorar el área.

Lara Méndez y el concejal Álvaro Santos
Lara Méndez y el concejal Álvaro Santos concello de lugo

Santos quiere «desatascar todo o que poidamos»

Álvaro Santos ya ha vivido sus primeros días al frente de Desenvolvemento Sostible y asegura que se encontró un ambiente «receptivo, que manifesta unha vontade colaborativa en impulsar os proxectos e axudar ao cidadán». Su intención es «xestionar e desatascar todo o que poidamos», y para ello está empapándose de todo lo que conlleva el área.

En cuanto a las prioridades, «van ser atender á cidadanía: non pode chegar un cidadán e atoparse con obstáculos. Os procedementos teñen que ser claros, coñecidos e accesibles. E logo, o desenvolvemento dos proxectos grandes, como o 5 % do PXOM, ou a definición de criterios interpretativos para que sexan máis axeitados para todo o mundo».

Los concejales del PP de Lugo, delante del Garañón
Los concejales del PP de Lugo, delante del Garañón

El PP denuncia que solo el 17 % de los expedientes se resolvieron en el plazo legal

El Partido Popular de Lugo define como «preocupante» el tiempo de media que el Concello de Lugo tarda en tramitar las licencias de obra urbana. Según los datos que maneja, en el 2020 tardaba un promedio de 330 días en resolver cada expediente, un plazo excesivo, pero muy por debajo de los 684 que promediaban las solicitudes del rural.

Los datos que manejan los populares hablan de que a lo largo del año de la pandemia el Concello de Lugo sacó adelante un total de 162 licencias urbanas de las que solo 28 se resolvieron dentro del plazo legal. «En todo o 2020 só resolveron en prazo o 17.28% das solicitudes de licenza dentro do casco urbano, se Lara Méndez segue a negar este feito ou segue sen ver un problema a realidade innegable é que se está a facer trampas ao solitario», sostiene el portavoz de los populares, Antonio Ameijide.

Revisando las licencias, el PP denuncia que la media de días que se tardó en 2020 en resolver los distintos expedientes osciló según su finalidad. Así, para ascensores promediaba 223 días, para edificios 475, para reformas 229, para obras 247 y para tejados la tardanza se iba hasta los 824 días.

Una anécdota de 1.659 días

Los expedientes más sangrantes que encontraron hablan de un permiso para intervenir en un tejado que tardó 1.659 días en resolverse, es decir, más de cuatro años, o los cerca de dos años que tuvieron que esperar unos propietarios para un ascensor.

Bajo el punto de vista de los populares, la tardanza en desatascar los expedientes pone en riesgo puestos de trabajo «xa que a construción é un dos principais motores económicos da cidade, polo que o que está a facer a rexedora é frustrar as posibilidades de crecemento da cidade nun momento moi complicado».

En este sentido, el PP argumenta que si en el 2020 las licencias urbanas tramitadas generaron un volumen de negocio de 23 millones, si se hubiesen activado más, esta cantidad hubiera crecido. «Preguntamos á alcaldesa se nalgún momento se parou a pensar en que situación podería estar Lugo se deran celeridade á concesión de licenzas», abunda Ameijide, que pide al nuevo edil del ramo, Álvaro Santos, que tome cartas en el asunto y solucione los problemas cuanto antes.