Oliver Laxe, profesor de cine en Os Ancares

dolores cela LUGO / LA VOZ

CERVANTES

El director prepara con alumnos de infantil y primaria un guion que se transformará en un corto

20 nov 2017 . Actualizado a las 23:18 h.

Os Ancares forma parte del universo del cineasta Oliver Laxe (París 1982), por eso cuando la asociación de padres del CEIP Cervantes le propuso impartir un taller de cine a 19 alumnos de infantil y primaria, dijo enseguida que sí. El primer encuentro fue ayer en el centro, donde empezaron a sentar las bases para escribir un guion, que se materializará en un corto. La protagonista será una burra, que los niños ven todos los días porque pasta en las inmediaciones del colegio, y a la que adoptaron como mascota.

El taller fue para Oliver Laxe «a escusa perfecta para cultivar a inocencia, que é o que mide aos artistas e aos cineastas». Esta primera sesión le sirvió también para recordar que su mejor película «xurdiu dun obradoiro coma este». Se refería a «Todos sodes capitáns», con la que ganó un premio en el festival de Cannes en 2010.

El director cinematográfico está acostumbrado a trabajar con niños y tiene sintonía con ellos. Y ante la pregunta de si hay diferencias entre los de Os Ancares y los de otras zonas, la respuesta no se dejó esperar. «Os nenos non teñen patria, son nenos. Son independentes». Y, en este caso, también unos privilegiados por poder participar en una actividad escolar de este nivel, que es posibles por las características del centro, por el número de alumnos y por la actitud positiva del profesorado.

Laxe, que rodará en marzo escenas de su próxima película «Aquilo que arde» en la aldea de Vilela, en Cervantes, donde tiene sus orígenes y a la que vuelve siempre que puede, confesó que al principio se encontró con unos alumnos tímidos. Fue por poco tiempo. El hielo lo rompió preguntándoles dónde vivían, para situarse. Conoce casi todas las aldeas. Después les contó su vinculación con Os Ancares. «Cando viviamos en Francia viñamos de vacacións e cando nos mudados a A Coruña, cada dous fines de semana».

El cineasta confesó que su principal objetivo era que los niños disfrutaran «do placer e a emoción de crear». Según la presidenta del ANPA, Isabel Calvete, lo consiguió y logró implicar a los niños que están ya deseando que llegue el segundo taller. El siguiente encuentro será dentro de dos meses y habrá un tercero.

El guion que están preparando gira en torno a la burra que pasta cerca de la escuela y a la que sugirieron incorporar a clase como parte de la historia. De ahí surgieron muchas ideas y un debate sobre si el animal se iba a enterar de algo o no, de las dificultades para aprender matemáticas o sobre por qué algunos tenían la certeza de que no se iba a enterar de nada. «Porque é unha burra», sostuvo más de uno.

Los incendios de octubre, según Laxe, no ocuparon ni una mínima parte del taller. «Falamos un pouco deles, pero notábase que non tiñan moitas ganas, porque houbo un momento no que lles preguntei que tipo de película querían facer se de terror ou alegre e responderon todos o unísono que alegre».

Laxe retomará en primavera el rodaje en Os Ancares de «Aquilo que arde» en su aldea, en la que vio el fuego muy cerca hace unos 15 años. «Vivo sempre angustiado de que se queime», confesó. También filmará en Viveiro, Monforte y en Tánger, donde figura una secuencia del guion. El estreno será en el 2019, en algún festival de cine.

Cuando el cineasta eligió Ourense para documentarse para la película no sabía que cerca de su casa en Vilela iba a tener todo el material a su disposición para inspirarse.

La protagonista del guion será una burra que pasta cerca del colegio de Cervantes