
Numerosos vecinos del municipio de Folgoso do Courel volvieron a amanecer ayer incomunicados. La subida de las temperaturas hizo subir la cuota de nieve, así que los problemas estuvieron ayer mucho más localizados en las aldeas situadas a más altura, al contrario que ocurrió el lunes, cuando las dificultades para utilizar las carreteras fueron generalizadas en todos los municipios de montaña.
A última hora de la mañana, la Diputación informaba que diez de las carreteras de la provincia que son de su titularidad estaban completamente cerradas a causa de la nieve y el hielo. Los municipios afectados eran Folgoso do Courel, Cervantes, A Fonsagrada y Pedrafida do Cebreiro. En cuanto a O Courel, los problemas más serios se produjeron en los núcleos de población que están a más de ochocientos metros de altura. Amanecieron aislados los pueblos de Teixeira, Visuña, Vilela, Noceda, Romeor, Millares y O Castro.
Los quitanieves fueron despejando las carreteras a medida que avancaba la mañana, pero en algunos puntos resultó especialmente complicado. Es el caso de la carretera que lleva hasta A Teixeira desde Seoane.
En una curva
Este vial tiene una curva en la que el viento suele acumular nieve cuando se producen temporales. Ayer ocurrió de nuevo y los operarios del vehículo quitanieves de la Diputación que trabajaban en esa zona tuvieron que desistir de despejar el acceso y recurrieron a una máquina excavadora.
A primera hora de la tarde, la alcaldesa, Lola Castro, explicaba que la salida norte del municipio hacia Pedrafita ya estaba accesible y que la mayor parte de los problemas de acceso a los núcleos más altos también habían quedado resueltos.