El presunto parricida de Guntín vuelve a su casa para participar en la reconstrucción de los hechos
LUGO
Se negó a declarar ante la jueza y ante la Guardia Civil, pero en su entorno coge fuerza la tesis de que trató de suicidarse y disparó a su padre por accidente tras un forcejeo
18 ene 2024 . Actualizado a las 18:37 h.Carlos Vázquez Varela, el presunto parricida de Guntín, regresó este jueves al domicilio familiar para participar en la reconstrucción de los hechos por los que ingresó en prisión el pasado domingo. El hombre está acusado de haber matado a su padre con una escopeta de caza cargada con postas. Es la primera vez que sale de la cárcel de Bonxe desde que entró allí hace ya cinco días.
Según las pruebas recabadas desde entonces por la Guardia Civil, Carlos, de 46 años, habría acabado con la vida de su padre, Pepe, disparándole con un arma de fuego. El suceso ocurrió a las 14.30 horas del pasado 14 de enero. Poco después, el sospechoso fue detenido y trasladado al cuartel de la Guardia Civil. Dos días después, fue enviado a prisión. Por primera vez, este jueves regresó a su casa, donde sucedieron los hechos.
Le acompañaron efectivos de la Guardia Civil y del juzgado, incluyendo la magistrada encargada del proceso y una de sus abogadas. Durante la mañana, Vázquez participó en la reconstrucción de los hechos en la vivienda familiar, ubicada en la aldea de Martín, en la parroquia de Entrambasaugas. El objetivo de los investigadores es tratar de esclarecer cómo ocurrió todo y en qué circunstancias. El detenido se mostró «colaborador», según fuentes judiciales.
¿Fue un accidente?
A estas alturas del caso, la mayor incógnita reside en descubrir la intencionalidad del suceso. Parece ya evidente para los investigadores que Carlos Vázquez empuñaba el arma con la que mató a su padre, pero en el entorno del detenido ha ido cogiendo fuerza la tesis de que pudo ser un accidente.
Según esta tesis, Vázquez habría recibido mal un cambio en su medicación. Estaba a tratamiento psiquiátrico, y unas nuevas pastillas le habrían causado problemas para dormir y pensamientos autolíticos. Por eso, en su entorno se sugiere que aquel día cogió la escopeta para tratar de suicidarse, pero su padre apareció en la habitación y comenzó un forcejeo que habría terminado con un disparo accidental en el cuerpo de Pepe Vázquez.
Las abogadas del detenido tendrán que preparar una estrategia de defensa y esta tesis podría ser un buen punto de inicio para construir un relato que buscase atenuantes.
Carlos Vázquez no opuso resistencia cuando fue detenido. «Creemos firmemente que no está en disposición de declarar. Ingresa en prisión con un protocolo de protección especial por su estado psicológico, que es de riesgo», sostenían sus abogadas este domingo, tras su entrada en la cárcel. De hecho, se encuentra bajo vigilancia en la prisión de Bonxe, con el objetivo de que no se autolesione. Según las abogadas, el de Carlos Vázquez «no es el perfil habitual de un detenido por estos hechos, para nada».