La nueva depuradora del polígono de Monforte sale a concurso por 4,2 millones

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

La actual depuradora del polígono de O Reboredo entró en funcionamiento en 1987
La actual depuradora del polígono de O Reboredo entró en funcionamiento en 1987 ALEX GÓMEZ

La planta de tratamiento del parque empresarial de O Reboredo se amplía por vez primera en 37 años

09 feb 2024 . Actualizado a las 18:42 h.

Casi cuarenta años después de su puesta en marcha, los sistemas de depuración del polígono de Monforte se adecuarán a la actividad de las industrias instaladas y a los planes de ampliación del suelo empresarial. La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil acaba de licitar la construcción de la nueva estación de tratamiento de aguas residuales, que sale a concurso por un presupuesto de 4.205.659 euros. El plazo de presentación de ofertas por las empresas interesadas en realizar las obras estará abierto hasta el próximo 4 de marzo. A partir de la firma del contrato, la adjudicataria dispondrá de un plazo de 24 meses para levantar las nuevas instalaciones y extender hasta el Cabe la canalización que sustituirá al desagüe que sale ahora sale al arroyo Carballo.

El proyecto que se incorpora al pliego de condiciones del concurso detalla que la depuradora actual ni siquiera está en condiciones de dar una respuesta adecuada a las necesidades actuales del parque empresarial de O Reboredo. Según la información que recoge, la capacidad de la planta pasará de 720 a 1.001 metros cúbicos diarios con las nuevas instalaciones. Este último caudal es el de referencia para el diseño de la futura estación de tratamiento, que estará provista de dos líneas que podrían ampliarse a tres en caso necesario.

Para la dotación de una tercera línea se reserva parte de la parcela del polígono cedida por el Ayuntamiento para la realización de las obras que ahora salen a concurso, situada en un terreno anexo al que ocupan las viejas instalaciones. Todo dependerá, en última instancia, del incremento de actividad que traigan consigo las ampliaciones que se van a llevar a cabo en el polígono monfortino. En principio esas dos líneas de tratamiento de aguas residuales serían suficientes para atender la incorporación de suelo industrial al este del parque empresarial, donde el Ayuntamiento tramita una modificación urbanística que convertirá en suelo industrial en torno a 130.000 metros cuadrados

Por su parte, la sociedad gestora del polígono, Suelo Empresarial del Atlántico (SEA), licitó recientemente una asistencia técnica para proceder a la modificación del plan sectorial de ordenación de las áreas empresariales e incluir como suelo industrial otros 275.000 metros del polígono de Monforte.

No caben más autorizaciones

Sin la mejoras de los servicios de tratamiento de aguas residuales la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil no podría permitir más vertidos por parte de nuevas empresas. «La planta de tratamiento fue diseñada para unos objetivos de vertido poco rigurosos que no resultan autorizables en la actualidad», advierte el proyecto. Las limitaciones de la depuradora, por otra parte, no son el único problema que está detrás de esta actuación. El punto de vertido de las aguas tratadas previamente deberá trasladarse al Cabe, mediante una conducción de algo más de un kilómetro. El arroyo Carballo, al que van a parar ahora, «no reúne las condiciones necesarias para soportar los caudales vertidos por el polígono industrial».

imagen virtual que recrea el aspecto que ofrecerá la nueva planta de tratamiento
imagen virtual que recrea el aspecto que ofrecerá la nueva planta de tratamiento

Las actuales instalaciones serán demolidas

Una auditoría realizada en el año 2022 puso de mAnifiesto el alto grado de deterioro de las instalaciones de la depuradora del polígono de Monforte, en la que no se llevaron a cabo reformas sustanciales desde su entrada en funcionamiento en el año 1987. La principal empresa productora de aguas residuales, Oviganic Ibérica, propiedad del grupo chino Yeeper Dairy, había tenido que instalar poco antes un sistema de tratamiento propio para evitar la sobrecarga de la instalación general por la ampliación de su actividad.

La actual estación de tratamiento de aguas residuales, según recoge el proyecto de la nueva depuradora, será demolida dado el «grado de envejecimiento de la obra civil y los equipos». Las instalaciones que la sustituirán estarán provistas de un bombeo de cabecera —donde se llevará a cabo un desbaste previo de los residuos— y líneas de tratamiento secundario por fangos activos y decantación. La conducción de desagüe irá desde la planta hasta el cauce del Cabe, que por su mayor caudal se considera más apto para recibirlas que el arroyo Carballo.