Acento uruguayo para el Escairón

luis conde MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

CEDIDA

El nuevo central, Diego Sabatel, pasó por el fútbol gibraltareño y el italiano

20 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La gran asignatura pendiente del Atlético Escairón en la primera entrega del campeonato fue su endeblez defensiva, una circunstancia que lo ha condenado al último puesto de la clasificación de la Preferente. Con el fin de corregir este problema, la directiva optó por reforzar el equipo en la retaguardia. Y así llegó Diego Sabatel, un central uruguayo con nacionalidad italiana de 22 años, que debutó ante As Pontes.

Fue clave en su llegada al club de O Saviñao el exlemista Lucas Basualdo, con el que coincidió en los últimos meses en el fútbol italiano. «Él me habló muy bien del Escairón y me convenció para que fichara. Me puso en contacto con Jorge, hablamos y di el paso», señala Sabatel.

Puede resultar extraño que un futbolista que quiera hacerse un hueco en el fútbol europeo opte por hacerlo en una categoría como la Preferente, pero tiene su explicación. «Me gusta asumir este tipo de retos, que pasan por comenzar desde abajo. El Escairón es un escaparate perfecto para darme a conocer. Ahora estoy centrado en ayudar al equipo a lograr la permanencia, y la temporada que viene me gustaría jugar en una categoría superior», añade Sabatel.

El defensa uruguayo tiene muy clara su hoja de ruta. «Yo quiero jugar en el fútbol profesional, porque quiero vivir de este deporte. Es mi pasión y lucho para que sea mi profesión», puntualiza.

A pesar de que tan solo tiene 22 años, a Diego Sabatel ya se le puede considerar un trotamundos del fútbol. Y es que ya fichó por su primer equipo, el Deportivo Maldonado, con tan solo 4 años. El futbolista nació en Punta del Este, y prácticamente en pañales ya le dio sus primeras patadas al balón. En el Deportivo Maldonado estuvo una década, y desde este equipo pasó al Atenas San Carlos.

Con 19 años se dio cuenta de que si quería ser alguien en el fútbol tenía que emigrar. «En Uruguay solo puedes vivir del fútbol si eres muy bueno y juegas en el Peñarol o en el Nacional. De lo contrario, tienes que cambiar de aires. Y en ese momento entró en contacto con un intermediario que lo llevó a la Primera División de Gibraltar. Fichó por el Mons Calpe, pero llegó la pandemia y la liga se paró.

Aunque este club le ofrece la renovación, a Sabatel le llegan cantos de sirena de Italia, y no se lo pensó. Tenía la oportunidad de probar suerte en el país de su bisabuelo. «Fiché por el Matera, un histórico de la Segunda División, que ahora está en la Quinta, pero que quería subir con un proyecto ambicioso. Estuve seis meses, pero vino la segunda ola del covid-19 y tuve que parar», asegura.

Ante la situación de incertidumbre, Sabatel decidió regresar a Uruguay, pero en agosto del año pasado volvió a Italia para fichar por el Civitanovese, un clásico de la Tercera División. Pero la destitución del técnico hizo que el uruguayo decidiera salir.

Llega a O Saviñao

En ese momento emerge la figura de Basualdo, que media para su llegada al Escairón. Y se concreta la operación. «Estoy muy contento de estar aquí porque me tratan muy bien. Estoy totalmente comprometido con el proyecto, y si bien sabemos que la situación no es fácil, tengo claro que podemos revertirla. De hecho, ante As Pontes hicimos un partido muy serio», señala.

Sabatel es un futbolista interesante. Asume el papel de líder, es un jugador expeditivo, tácticamente ordenado y técnico. «Soy muy fuerte en el juego físico, y me gusta salir con el balón siempre que no haya riesgo», concluye.