Monforte, el sitio más oscuro

Francisco Albo
francisco Albo MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

ALBERTO LÓPEZ

Un mapa elaborado con datos del 2017 sitúa la ciudad entre las áreas con menos horas de luz solar del territorio gallego

12 ene 2018 . Actualizado a las 21:43 h.

Monforte ocupa un lugar destacado en un mapa que refleja las horas de sol acumuladas en Galicia a lo largo del año pasado que fue elaborado por el geógrafo y climatólogo Dominic Royé con fines divulgativos. El gráfico indica que el valle de Lemos -y sobre todo su parte más baja, donde se encuentra la ciudad- es una de las áreas de toda la comunidad con menos horas de sol, lo que el investigador atribuye en gran parte a la presencia de los característicos bancos de niebla que a menudo persisten durante semanas enteras en otoño e invierno.

Royé elaboró el mapa utilizando datos recogidos en las estaciones de Meteogalicia. El investigador realizó otros mapas de nubosidad con tiempo anticiclónico en verano e invierno -en este caso con datos de satélites meteorológicos de la Nasa- que muestran que este fenómeno también es típico del territorio y que influye igualmente en la limitación de las horas de sol.

En el mapa, las áreas con menos luz solar aparecen coloreadas en diferentes tonos de verde. Los más oscuros indican que en esos territorios se acumularon entre 1.613 y 1.800 horas de sol durante el 2017. En el otro extremo se sitúan las áreas de color rojo oscuro del sur de las provincias de Ourense y Pontevedra, con 2.411 y 2.539 horas de sol.

El geógrafo apunta que esta circunstancia confiere a Monforte un carácter especial en el contexto de la mitad sur de Galicia, convirtiéndolo en el área con menos horas de sol de todo este territorio. «También hay poca luz en la sierra de Manzaneda, pero el caso es algo diferente porque es una zona de alta montaña», agrega. En el contexto de toda la comunidad -indica Royé por otro lado-, Monforte se sitúa en unos niveles comparables a los de la Mariña lucense, que registra las menores cantidades de luz solar de toda Galicia.

Situación geográfica

Por lo que respecta a las nieblas, Dominic Royé señala que las de Monforte se deben a una combinación de factores como la situación geográfica y el relieve. «Son características de lugares situados en mesetas interiores, como pasa también con Ourense», explica. En su mayor parte -agrega- son nieblas de irradición, propias de los períodos anticiclónicos, que se forman durante la noche por el enfriamiento del aire cercano al suelo y perduran a lo largo de la mañana siguiente. Son muy diferentes de las nieblas frontales, asociadas a los movimientos de masas de aire, que son típicas de la costa.

«En Galicia no hay estudios sobre el influjo de la niebla en el estado de ánimo»

De origén alemán, Dominic Royé estudió con una beca Erasmus en la Universidade de Santiago, donde se doctoró en Geografía Física. En la actualidad trabaja como investigador y docente universitario postdoctoral en Oporto. En Galicia colaboró en investigaciones sobre meteoropatía, es decir, en el estudio de la influencia de las condiciones meteorológicas en las dolencias físicas y mentales.

-¿Conoce personalmente las nieblas monfortinas?

-Sí, porque mi mujer es de Ourense y estuve muchas veces de visita por esas tierras y el sur de Lugo. Las nieblas no solo son típicas de Monforte, sino de todo el valle del Miño. La ciudad de Ourense también tiene menos horas de sol que otras partes de Galicia, aunque el fenómeno no es tan acentuado como en Monforte porque su situación geográfica es diferente.

-En Monforte hay gente que se deprime con las nieblas persistentes. ¿En Galicia hay estudios de meteoropatía sobre estos fenómenos?

-No, ahora mismo no se están haciendo investigaciones en este sentido. Pero en otras partes de Europa sí se han realizado investigaciones sobre la influencia de la escasez de la luz solar en los estados de ánimo de las personas.

-¿En qué lugares?

-Por ejemplo, en países como Noruega, donde los días sin sol pueden durar meses y meses. Está claro que un problema que no tiene una solución fácil. A la gente le afecta la falta de luz no le queda más remedio que acostumbrarse, a no ser que se traslade a vivir a otros territorios.