El bum ciclista del puerto de Ancares

LEMOS

OSCAR CELA

Que finalmente la cima pertenezca a la provincia de Lugo le abre posibilidades de consolidarse como final de etapa

02 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A nadie se le escapa que detrás de la reciente reclamación por parte de la Diputación de León sobre la ubicación del puerto de Ancares (1.669 metros de altitud) estaba la gloria de administrar un tesoro, «un luxo», como señala Manuel, veterano hostelero de Piornedo. Fue a principios de este siglo cuando varios aficionados pusieron en conocimiento de los directivos de La Vuelta las cualidades que tiene este puerto, desconocido para el gran público pero admirado por los cicloturistas: dispone de varias vertientes, gran dureza (especialmente por la cara de Pan do Zarco), posibilidad de enlazarlo con otras subidas de la zona y un paisaje hermoso.

Los responsables de La Vuelta recibieron un dosier con altimetrías y propuestas de etapas. Nace en ese momento la idea de que en Os Ancares se encontraba una cima que se comparaba por su dureza con el Mortirolo, la cumbre italiana de Los Dolomitas que, al igual que Ancares, forma parte del encanto del ciclismo moderno, ya que se subió por primera vez en el único Giro que ganó Giani Bugno, en 1990.

Una de las ventajas que se destacó en su momento del puerto de Ancares es que precisamente se trata de un paso de montaña, algo poco común en España, donde abundan los puertos en los que termina la propia carretera: Angliru, Lagos de Covadonga, La Farrapona, La Pandera o Cuitu Negro. En este sentido, Ancares y los encadenados con otros próximos (Folgueira de Aigas o Pelliceira) pueden hacer de la cumbre lucense algo similar a la suma de Télégraphe y Galibier, con más de 30 kilómetros.

En un libro de referencia

El periodista Daniel Friebe y el fotógrafo Pete Goding, ambos especialistas en ciclismo, publicaron hace cuatro años el libro Ascensiones secretas. 50 nuevos puertos que deberías descubrir, en el que ya daban cuenta de la importancia del puerto de Ancares y destacaban su similitud con la cima del Galibier.

La repercusión mediática que tuvo las tres veces que se subió el puerto lucense (2011, primero Dani Moreno camino de Ponferrada; 2012, ganó Joaquín Rodríguez; y 2014, por Pan do Zarco, victoria de Contador ante el imbatible Froome, y los españoles Valverde y Purito), la publicación de libros como el de Friebe y Goding, el bum de las redes sociales, así como las imágenes de televisión que se pudieron ver en los cinco continentes, abrieron unas posibilidades enormes para esta cima. La etapa del 2014 tuvo una audiencia en España de 2,3 millones de espectadores (18,7%), con el minuto de oro de 3,1 millones.

«Houbo un antes e un despois da chegada de La Vuelta, todas as fins de semana temos grupos de ciclistas que escalan o porto e pasan os días na comarca», explica el alcalde de Navia de Suarna, José Fernández. El regidor socialista indica que acuden a entrenarse al puerto de Navia equipos profesionales, y el beneficio económico y la promoción está siendo enorme. Esta idea la ratifica Manuel, al frente del Hotel Piornedo, que durante los últimos 35 años ha visto cómo ha evolucionado el turismo en Os Ancares: «O goteo de equipos ciclistas e de afeccionados ao ciclismo que veñen a Os Ancares é enorme desde hai máis de cinco anos». Manuel, que habla con frecuencia con los ciclistas que vienen a su hotel, apunta que estos destacan la dureza del puerto. «Valoran moito que teña varias vertientes e logo é un porto cun microclima especial, que o fai máis duro, incluso un inferno, por culpa da orientación noroeste». Manuel es muy claro: «É un luxo para Galicia, e os Ancares son os Pirineos de Galicia, deberían estar moito máis promocionados».

La Vuelta del 2018

Por este motivo, la clara declaración del Instituto Geográfico Nacional de que el puerto de Ancares pertenece a la provincia de Lugo y, por tanto, a Galicia abre mayores posibilidades para intentar promocionarlo a nivel turístico y, en el caso deportivo, para que regrese cuanto antes a alguna edición de La Vuelta. En la del 2018 habrá dos etapas por Galicia: una, por Ribeira Sacra, el 5 de septiembre, que intentará paliar el desastre televisivo del 2015 cuando falló la señal del helicóptero; y otra, el 6 de septiembre, que irá desde Mondoñedo, por Ribadeo, hacia Estaca de Bares. Serán dos etapas de las conocidas como de transición, antes de las jornadas con puertos finales en Asturias.

¿Regresará Ancares en las próximas ediciones de La Vuelta? La Xunta y la Diputación tienen ahora por delante el reto de seguir agrandando la leyenda de una cima que para muchos aficionados del ciclismo en España es la más dura. Como relataba un bloguero especialista en altimetrías, «Ancares es un sueño hecho realidad». En el libro de Friebe y Goding, el ganador del Tour del 2008, Carlos Sastre, indica que solo el puerto de Larrau, en Navarra, podría comparase a Ancares. En el lucense, por Pan do Zarco, son 12 kilómetros al 9,25% y Larrau son 14,8 kilómetros al 8,14%, pero en este caso solo es por la vertiente francesa, con lo que el ciclista abulense afirma con rotundidad que para él Ancares es lo más duro de la península.