Colectores al borde del colapso en el centro de Monforte

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Limpian el alcantarillado en la calle Huertas para prevenir vertidos al Cabe en el Parque dos Condes

08 ene 2016 . Actualizado a las 22:30 h.

La limpieza de colectores que efectuó ayer Aqualia en la calle Huertas no tuvo carácter rutinario. El saneamiento estaba a punto de colapsarse en esa zona del centro de Monforte, uno de los «puntos calientes» que recoge el plan de reducción de vertidos remitido a la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil. De la puesta en práctica de sus directrices no solo depende la mejora de la salud de las aguas del Cabe. También está en juego la desaparición de las trabas que impiden por ahora dar licencia de obras a la primera empresa que está interesada en instalarse en el puerto seco.

El problema desaparecería de un plumazo con la construcción de una nueva depuradora con mayor capacidad de tratamiento que la que se construyó hace un cuarto de siglo. Pero en el actual contexto económico no parece sencillo reunir los doce millones de euros que se calcula que costarían las nuevas instalaciones. Aparcada esa opción, al Ayuntamiento no lo queda más remedio que parchear los puntos más conflictivos del saneamiento para evitar nuevos encontronazos con la confederación por vertidos contaminantes al Cabe.

La empresa adjudicataria del saneamiento fue advertida recientemente por los responsables municipales de la necesidad de atender en mayor medida la limpieza de los colectores. Ayer desplazó desde Vigo el camión que utiliza para desatascar -mediante un sistema de limpieza a presión- los tramos de alcantarillado en peores condiciones. En el caso de la calle Huertas, existía riesgo de que la tubería quedase tupida. Cuando eso sucede, el desagüe situado entre el puente nuevo y el Parque dos Condes sirve de aliviadero para todo tipo de residuos.

La limpieza del colector de la calle Huertas coincide con las primeras lluvias importantes del invierno. Los vertidos a la altura del Parque dos Condes se producen precisamente cuando el alcantarillado soporta más carga como consecuencia de las precipitaciones y la filtración de aguas pluviales a la red. «O que se lle dixo á empresa é que hai que ir limpando as zonas que poidan ser máis conflitivas. Canto maior sexa o mantemento, menor risco hai de sobrecarga», dice el alcalde, José Tomé.

Desde el año 2004

El contrato suscrito en el 2001 con Aqualia -por aquel entonces Seragua- obliga a la empresa a limpiar con regularidad los sumideros. A pesar de ello, la presencia de la maquinaria que realizó ayer estas tareas en la calle Huertas no es muy habitual en Monforte. La última campaña intensiva de estas características se llevó a cabo en el 2004. El equipo de limpieza a presión actuó ese año en las calles Rof Codina, Juan Ramón Jiménez, San Pedro, Corredoira, Reboredo, Benito Vicetto, Arousa, Chantada, Morín y Malecón. Aunque las deficiencias en la red de saneamiento son de sobra conocidas, los problemas de saturación de los colectores se asociaron entonces a vertidos «indebidos».

Tomé busca ahora un acuerdo con Aqualia que permita resolver de una vez por todas la controversia sobre el grado de cumplimiento de la concesión. Por el momento, las negociaciones se llevan a cabo entre técnicos de la empresa adjudicataria y del Ayuntamiento. «Cando cheguen a algunha conclusión, será o momento de tomar as decisións políticas», señala el alcalde.