El proyecto espera desde hace un año un permiso de la CHN La finca de una familia se inunda con aguas residuales cuando las lluvias son intensas
21 feb 2006 . Actualizado a las 06:00 h.AGUAS FECALES EN EL PRADO. La foto fue sacada la semana pasada por la familia de Luis Daorden cuando la finca que rodea su casa se llenó de aguas residuales desbordadas del colector por las fuertes lluvias Hace aproximadamente un año que la Confederación Hidrográfica del Norte (CHN) tiene pendiente de responder una solicitud de permiso básica para la construcción de la red de depuración de aguas residuales de Taboada. Las obras no están paralizadas, porque siguen adelante en otros puntos distintos, pero este trámite burocrático impide avanzar el proyecto en la canalización de las aguas pluviales, fundamental para evitar situaciones como la que está sufriendo una familia Puricela, la zona en la que, cuando llueve con fuerza, se desborda el canal que lleva las aguas residuales del pueblo hasta el río Toldao. En Puricela tiene Luis Daorden su casa familiar y una finca de gran tamaño dedicada a pastizal. Cerca de ese lugar desemboca en el río Toldao el canal natural al que convergen desde siempre las aguas residuales de Taboada, y desde que empezó la construcción del nuevo alcantarillado y la depuradora, también toda el agua de lluvia que cae en el pueblo. Cuando llueve mucho el canal se desborda justo al lado de la casa de Luis. «A última vez foi a semana pasada -cuenta-, un día de moita choiva que nos puxo o prado feito unha porquería». Fuente contaminada El alcantarillado de Taboada siempre pasó por Puricela, así que este problema no es nuevo para la familia de Luis. De hecho, en tiempos las aguas fecales le habían contaminado una fuente y amenazaban con impedirle usar también el pozo de la casa. Para evitarlo, reconstruyó la traída de aguas de la casa y construyó un canal para controlar el paso de las aguas residuales por sus propiedades. Con eso era suficiente, hasta ahora. «Volvimos ter problemas despois de que empezasen as obras da depuradora», se queja. Tuvieron problemas de nuevo porque tal como están las obras en este momento toda el agua de lluvia que cae en Taboada va a parar al canal que llega a Puricela. «O permiso que necesitamos da confederación afecta ás obras na rúa das Insuas, o punto no que se recollerán as augas pluviais da parte alta do pobo para desvialas ao regato de Riazón e impedir así que vaian tamén a Puricela e ao río Toldao», asegura el alcalde, José Ramos Ledo. Las obras tuvieron que detenerse en As Insuas por la denuncia de un vecino, que temía que el nuevo colector de pluviales pudiese causar inundaciones en su casa. La confederación hizo caso de su queja y ordenó cambiar el proyecto. «Modificamos o proxecto, e conseguimos financiamento de Augas de Galicia para ese modificado, pero seguimos á espera de que a Confederación Hidrográfica o acepte e nos dea permiso para seguir traballando». Mientras tanto, será imposible garantizar que las aguas residuales no se desborden al llegar a Puricela.