Es la última batalla del Kremlin para conquistar toda la provincia de Lugansk
31 may 2022 . Actualizado a las 09:09 h.Las fuerzas ucranianas y rusas combate casa por casa en la ciudad de Severodonetsk, la última gran batalla para que el presidente Vladimir Putin cumpla con su objetivo de completar el control de Lugansk y avanzar hacia la vecina Donetsk, las dos provincias de la región del Dombás. «Ya se está luchando en las calles de Severodonetsk. El enemigo avanza», dijo el gobernador regional, Serhiy Haidai, tras confirmar la entrada de los soldados rusos en uno de los principales núcleos urbanos de Lugansk, que tenía unos 102.000 habitantes antes de la guerra, informa Efe.
El gobernador aseguró que la «infraestructura crítica de la ciudad ha sido destruida casi al cien por cien, mientras el 90 % de las viviendas ha sufrido daños y, entre ellas, el 60 % muestran un estado ruinoso». «No se llevan a sus soldados muertos. La ciudad está llena de cadáveres rusos, las calles están ardiendo; esto puede provocar infecciones», subrayó.
Periodista muerto
Uno de los bombardeos rusos alcanzó un vehículo blindado de evacuación y mató al periodista francés Frédéric Leclerc Imhoff, de 32 años. El presidente Emmanuel Macron confirmó la muerte del cámara de la cadena BFM TV, tras ser alcanzado en el cuello por un trozo de metralla del Ejército ruso.
Con él, se elevan a ocho los informadores fallecidos en este conflicto, según Reporteros Sin Fronteras (RSF).
«Francia exige que se lance lo antes posible una investigación transparente para arrojar toda la luz sobre las circunstancias de este drama», afirmó en un comunicado la ministra francesa de Exteriores, Catherine Colonna, que precisamente se encuentra este lunes en Kiev.
Huida en bicicleta
Un ciclista ucraniano evitó los bombardeos de guerra ruso huyendo en su bicicleta durante siete horas y recorriendo alrededor de 70 Km desde su ciudad natal sitiada, Severodonetsk, hasta Bakhmut, tramo que logró cubrir ileso.
Arif Bagirov,d e 45 años, salvó la vida recurriendo a la bicicleta para esquivar las bombas que caían en la localidad de la región de Lugansk en el este de Ucrania, pedaleando sin parar hasta llegar a Bakhmut, una ciudad bajo control ucraniano, antes de viajar en autobús a la capital, Kiev, según refleja cyclingweekly.
Además de luchar en Severodonets, el Ejército ruso trata de controlar la ruta entre las poblaciones vecinas de Lisichansk-Bakhmut, mientras las milicias prorrusas tienen a tiro Sloviansk, ciudad de Donetsk.
Aunque el Ejército ruso centra sus ataques en el este, también realiza esporádicos lanzamientos de misiles en el oeste del país, como en Odesa, donde dañó varias infraestructuras en el estuario del rio Dniéster,, o un astillero en Mykolaiv.
Atentados contra el ocupante
Mientras en las ciudades controladas por Rusia en el sur, la resistencia ucraniana comienza a lanzar atentados contra los ocupantes. Es el caso de Melitópol, donde al menos dos personas resultaron heridas en la explosión de un coche bomba que tenía como objetivo al delegado de la región impuesto por el Kremlin.
Las autoridades prorrusas de Donetsk adelantaron que algunos de los prisioneros de la planta de Azovstal serán condenados a la pena de muerte. Los soldados ucranianos que han sido liberados denuncian que sufrieron torturas y malos tratos por parte de los invasores y, algunos de ellos, fueron obligados a tener relaciones sexuales, denunció la defensora del pueblo de Ucrania, Ludmila Denisova.