Londres amenaza a París con devolver a los migrantes que localice en el Canal

Juan Francisco Alonso LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Un agente carga con un niño migrante rescatado en el canal de la Mancha.
Un agente carga con un niño migrante rescatado en el canal de la Mancha. PETER NICHOLLS | Reuters

Francia replica que no aceptará prácticas contrarias al derecho internacional

10 sep 2021 . Actualizado a las 08:24 h.

La oleada récord de migrantes ilegales que han llegado a las costas británicas desde Francia en los últimos días y los planes del Gobierno de Boris Johnson para hacerle frente están tensando las relaciones con París a unos niveles no vistos desde las duras negociaciones del brexit. Londres se propone devolver inmediatamente a territorio galo, y sin ningún tipo de procedimiento, a los simpapeles que sus policías y militares detengan en el canal de La Mancha o en tierra, algo que las autoridades vecinas rechazan de plano, por considerarlo contrario al derecho internacional.

El anuncio del Home Office (Ministerio de Interior británico) de que los agentes de la Border Force (guardia de fronteras) comenzarán a obligar a los cayucos que detecten en sus aguas a «cambiar de rumbo» y dar media vuelta hacia Francia ha caído muy mal en el Ejecutivo de Emmanuel Macron. Y no podía ser de otra manera, pues la noticia se produjo horas después de que el ministro galo de Interior, Gérald Darmanin, se reuniera con su homóloga británica, Priti Patel, para diseñar un plan conjunto, algo que parece que no lograron.

«Francia no aceptará ninguna práctica contraria a la ley marítima», escribió en Twitter Daramanin. Antes, en una misiva a Patel que llegó a la prensa, el galo ahondó en su rechazo hacia la propuesta británica. «La posición francesa sobre la intervención en el mar se mantiene sin cambios. La salvaguarda de vidas humanas tiene prioridad sobre las consideraciones de nacionalidad, estatus y política migratoria (…) El uso de devoluciones marítimas a las aguas territoriales francesas corre el riesgo de tener un impacto negativo en nuestra cooperación», zanjó.

Solo entre el lunes y el martes se estima que casi 1.500 migrantes intentaron entrar ilegalmente al Reino Unido en pequeñas embarcaciones desde Francia, de los que más de 200 lo lograron. En lo que va de año, 13.500 personas trataron de entrar irregularmente al país por el Canal, según las autoridades británicas, cifra que equivale al 60 % de lo registrado en todo el 2020.

La propuesta de devolver a los migrantes capturados es apenas una de las radicales propuestas británicas para parar la marea de simpapeles. Londres también amenazó a París con suspender el acuerdo suscrito el verano pasado por el que se comprometía a entregar 54 millones de libras (62 millones de euros) a la policía y autoridades migratorias galas para financiar sus operaciones contra la trata de personas.

«No aceptamos chantajes financieros», replicó Daramanin, mientras que desde Downing Street matizaron que esperaban resultados antes de continuar con las erogaciones de fondos.

La idea de devolver en caliente a los inmigrantes irregulares ha alarmado a la ONU también. El relator para migrantes, el chileno Felipe González, calificó de «preocupante» el anuncio, por cuanto representaba «una violación al derecho al asilo y otros derechos humanos». Londres aclaró después que solo cuando el clima y las condiciones de las embarcaciones lo permitiera sus agentes forzarían a las mismas a dar la vuelta. Asimismo, aseguró que sus agentes tienen dos años entrenándose para cumplir esta tarea de manera segura.