Putin refuerza la alianza con Orbán, su ariete en la UE

La Voz MOSCÚ / COLPISA

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ALEXEI DRUZHININ / SPUTNIK / KRE

El primer ministro de Hungría llama a levantar las sanciones a Moscú y denuncia la deriva antirrusa en el oeste de Europa

03 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Vladimir Putin estuvo ayer en Budapest para reunirse con el primer ministro húngaro, Víktor Orbán, su principal aliado y ariete en la Unión Europea. Es la tercera reunión que mantienen en los últimos tres años y, según reconoció el portavoz del Gobierno magiar, János Lázár, ambos mandatarios se proponen dar prioridad a las relaciones bilaterales por encima de los compromisos multilaterales, en aparente alusión a las obligaciones que emanan de la pertenencia a la UE.

«Este será un año importante desde el punto de vista de la política exterior, no solo por la elección de Donald Trump y el brexit. Llega la era de la cooperación bilateral en sustitución de la cooperación multilateral», considera Lázár. Exactamente el mismo pensamiento expresó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

Orbán está deseando levantar las sanciones impuestas a Rusia por la anexión de Crimea y la ayuda a los separatistas del este de Ucrania para que el Kremlin elimine a su vez el embargo decretado como represalia contra los productos agroalimentarios europeos. Esta cuestión estuvo muy presente en el encuentro entre Putin y Orbán. El Ejecutivo húngaro se queja de que las exportaciones a Rusia han caído un 50 % en los últimos tres años, perjudicando a diversos sectores productivos del país.

Otros propósitos del presidente ruso en Hungría son impulsar proyectos económicos e «intercambiar opiniones sobre diversos asuntos de actualidad internacional», incluido el rebrote de violencia en Ucrania. A este respecto y pese a que fueron los rebeldes separatistas los que violaron el alto el fuego atacando el fin de semana la localidad de Avdéyevka (Donetsk), Putin fustigó al Gobierno de Kiev asegurando que están «agravando premeditadamente la situación» para lograr ser oídos por Donald Trump.

El dirigente húngaro, por su parte, llamó al establecimiento de unas buenas relaciones con Rusia, que incluiría lógicamente el levantamiento de las sanciones. Según su opinión, «en la región occidental de Europa está muy de moda ahora la política antirrusa». Ambos dirigentes prorrogaron el acuerdo para el suministro de gas ruso a Hungría hasta el 2021 y convinieron en ultimar el proyecto para ampliar la central nuclear de Paks. El coste se calcula en 12.000 millones de euros, el 80 % de los cuales serán financiados por Moscú.

Orbán y Putin se profesan una gran admiración mutua y tienen numerosos puntos en común. Les gusta Trump y su defensa del derecho de cualquier país a poner por delante sus propios intereses. También coinciden en apoyar a Bachar al Asad. Orbán ha insistido en apoyar a Rusia porque la paz en Siria es la mejor forma de reducir el flujo de refugiados.